Chile: el gobierno y una parte de la oposición acuerdan convocar a plebiscito para una nueva Constitución 

883
Contexto Nodal
El 4 de octubre el presidente Piñera anunció el aumento del transporte público en unos 30 pesos (1,16 USD, aproximadamente), lo que provocó que estudiantes secundarios impulsaran “evasiones” en el Metro para no pagar el pasaje. Esa forma de protesta se masificó desde el 17 de octubre y dio lugar a un estallido social en el que salieron a la luz las múltiples demandas del pueblo chileno. La respuesta del gobierno fue la represión y la implementación del Estado de Emergencia y el Toque de Queda. Las movilizaciones, huelgas y cacerolazos continúan en todo el país. Hay numerosas denuncias de violaciones a los DDHH: asesinatos, detenciones arbitrarias, desapariciones y abuso sexual por parte de las fuerzas de seguridad.

Una Constitución desde cero: El acuerdo histórico de la clase política para dar salida a la crisis

Casi a las 2 de la madrugada salió “humo blanco” en el Congreso. Los presidentes de los partidos, senadores y diputados se sentaron a la mesa del salón Pedro León Gallo y anunciaron, a través del presidente del Senado, Jaime Quintana (PPD), la puesta en marcha de un proceso constituyente que permitirá sustituir la actual Constitución de 1980. La expectación era máxima entre asistentes y periodistas, después de una jornada llena de negociaciones que se intensificaron a última hora. Minutos antes de entregar la versión final del acuerdo, y a la espera de que aparecieran todos los protagonistas, la sala vivía momentos frenéticos entre parlamentarios que ya daban declaraciones a la prensa y los que se felicitaban entre abrazos, independientemente de su sector político. Una imagen que se repitió también al finalizar la comparecencia.

El acuerdo presentado por la oposición –excepto el Partido Comunista, el Partido Progresista, el Partido Humanista y el Partido Regionalista Verde– plantea en su primer punto, suscribir un “acuerdo de restablecimiento de paz y orden público”. En segundo lugar, impulsar un plebiscito que se realizará en abril de 2020 y en el que la ciudadanía responderá a dos preguntas: ¿quiere usted una nueva Constitución? y ¿qué tipo de órgano debiera redactar la Nueva Constitución? Aquí tendrá la posibilidad de elegir entre una Convención Mixta Constitucional –formada en un 50% por ciudadanos y otro 50% por parlamentarios que deberán abandonar su cargo– o una Convención Constitucional. Esto último no es otra cosa que lo que hasta hoy se conocía como Asamblea Constituyente, pero, al parecer, esta denominación incomodaba a los sectores de la derecha, por lo que se optó por bautizarla de otra forma.

Tras la lectura del texto, los presidentes de los partidos que suscribieron el acuerdo hicieron sus respectivos pronunciamientos. El estallido social que Chile vive desde hace un mes fue protagonista de los discursos del Frente Amplio y de la ex Nueva Mayoría. Se recordaron a las personas fallecidas, heridas y a las víctimas de los derechos humanos. “Hoy Gustavo Gatica no puede ver”, partió diciendo Gabriel Boric (Convergencia Social) a su turno. “La gente que hizo posible este acuerdo está siendo fuertemente reprimida. En Lo Hermida, en Lo Prado, en Catalina Pérez, presidenta de RD: “Este acuerdo es mérito de la gente, no de los partidos que estamos aquí sentados”, agregó. Natalia Castillo (RD) emocionada, con lágrimas en los ojos, la escuchaba atentamente. A su lado, la presidenta de los gremialistas, Jacqueline van Rysselberghe, no podía esconder su cara de fatalismo: “La UDI hizo un esfuerzo de diálogo en un ambiente donde estaba reinando la violencia, el miedo y la falta de paz en nuestra sociedad”, expresó cuando llegó su turno.

Los puntos de tope

A las 12 de la noche, los pasillos del ex Congreso eran un ir y venir de diputados, senadores, representantes políticos y periodistas. Todos tenían una cosa en común: andaban pegados a sus celulares. Las negociaciones estaban a esa hora en su momento clave, con toda la atención puesta en el primer piso, donde un grupo de parlamentarios del oficialismo discutía los últimos detalles de la propuesta de acuerdo. “¡Ahí está la cocina!”, bromeaba el diputado Giorgio Jackson (RD) mientras señalaba la cocina real del edificio.

A esa hora estaban consensuados los principales puntos del acuerdo, como la convocatoria de un plebiscito previo y posterior y lo que se denominó la “hoja en blanco”, es decir, que el texto se redacte desde cero. Esto fue una de las condiciones que la UDI acabó por aceptar.

Para el senador Francisco Huenchumilla (DC) eran relevante los efectos jurídicos y políticos que generaría partir o no de una “hoja en blanco”. “Por ejemplo ­–explicó- las normas que rigen las comisiones mientras se está trabajando la Asamblea y si no hay acuerdo por los quórums, ¿sigue vigente o no la Constitución del 80? Son cosas técnicas pero que producen un tremendo problema si hay un vacío’”, cuestionó.

A la una de la mañana, todavía se esperaba que la derecha saliera de la reunión en el segundo piso del Congreso. El principal obstáculo se centraba en el cuórum requerido para aprobar la carta fundamental. La fracción que se barajaba era la de 2/3, pero el punto crucial sería ese cuórum se aplicaba a cada artículo, a cada capítulo o de forma general a todo el texto. Esa última opción sería la apuesta de la derecha porque de ser así, siendo minoría podrían vetar el texto completo. Finalmente, ese punto no se resolvió y debería de tratarse a través de la ley orgánica que regulará el proceso constituyente.

El diputado democratacristiano Matías Walker, miembro de la comisión de Constitución, opinaba que se ha dado un “buen diálogo entre los sectores” para alcanzar los acuerdos centrales y que lo que quedaba por cerrar eran algunos detalles, como la manera de elegir los delegados de la Convención.

Mientras en interior del Congreso se seguían al detalles las interioridades de la negociación, afuera centenares de personas se congregaron en una especie de protesta improvisada que llevó a los guardias a cerrar el acceso principal.

“A mí lo que me incomoda es que nos estén todos”, decía la diputada Claudia Mix (Comunes) en una conversa de pasillo. Mix explicó que en la tarde se comunicó con los presidentes de los partidos que se restaron de las negociaciones, pero que le respondieron que no fueron invitados. “Aquí nos hemos autoinvitado todos”, espetó ella, aunque reconoció que ha habido pocos esfuerzos para que la suma de fuerzas fuera completa. Sin embargo, la pregunta que circulaba entre pasillos era cómo afectaría a estas fuerzas el hecho de no haber sido partícipes de la negociación que convirtió la noche de este jueves un hito histórico.

Revisa aquí el acuerdo completo:

El Desconcierto


Los partidos que quedaron fuera de la firma

Mientras en la sede en Santiago del Congreso Nacional los parlamentarios y dirigentes de la ex Concertación y de la mitad del Frente Amplio se paseaban nerviosos aún por los pasillos, porque las horas corrían como ese halo de quien está pensando en la historia, algunos kilómetros al sur, en Ñuñoa, los dirigentes de otros partidos políticos citaban a una conferencia de prensa para cuestionar aquel momento.

Allí estaban los presidentes del Partido Comunista, Guillermo Teillier; del PRO, Camilo Lagos, y del Frente Regionalista Verde Social (FRVS), Jaime Mulet.

Las críticas apuntaban a uno de los momentos que pudo impedir el acuerdo sellado en la madrugada de este viernes entre Chile Vamos y la mayoría de la oposición: si acaso el cuórum de 2/3 (en particular y en general) se dejaría para evitar cambios en la actual Constitución o si, en cambio, se instalaría como condición para la denominada «hoja en blanco», es decir, para una Constitución que surgiera desde cero. La oposición buscaba esto último y, de hecho, lo consiguió. Pero cuando lo hizo, los partidos que no se plegaron al acuerdo ya se habían autoexcluido del pacto.

Además, desde la misma oposición dicen que el Partido Comunista siempre estuvo invitado a la jornada del viernes, que empezó a debatir todos los puntos en Santiago a partir de las 11:30 de la mañana.

Plantean que si las diputadas Carmen Hertz y Camila Vallejo fueron capaces de entrar a la sala de reuniones donde partió toda la conversación transversal el mismo miércoles por la tarde, en Valparaíso, cuando no estaban invitadas, con mayor razón debieron asistir el jueves cuando sí estuvieron convidadas.

La excusa, agregan los críticos a la postura del PC, es que los comunistas prefirieron excluirse para evitar mostrar que no tenían el control de diversas manifestaciones en las calles justo en el día de la conmemoración de un año del crimen de Camilo Catrillanca.

La fractura del Frente Amplio

Pero la distancia entre el empeño por el acuerdo y el abandono a media tarde no solo sucedió entre los comunistas.

También ocurrió con el Partido Humanista y con Convergencia Social (CS), ambos del Frente Amplio, que durante la mañana sí estuvieron en las conversaciones y se retiraron cuando supusieron que Chile Vamos no cedería en el criterio de «los 2/3».

Sin embargo, el diputado Gabriel Boric, de CS, sí se quedó. Y fue de hecho un factor relevante para destrabar algunos de los puntos, sobre todo en sus conversaciones con el diputado UDI Jaime Bellolio.

Pero Boric se quedó solo. Tan gráfica fue su soledad que fue el único de los signatarios del acuerdo que no pudo agregar el partido al que representaba en esa hoja llena de rúbricas (ver la imagen que acompaña este artículo).

Consultado sobre la ausencia de su propio partido, el diputado contestó: «Ya habrá tiempo para hablar de eso. No es relevante en estos momentos. Acabamos de terminar con la Constitución de Pinochet. Es un día histórico y ese es el tema del que hay que hablar hoy día».

Para el diputado de Revolución Democrática Giorgio Jackson, la ausencia de quienes no estuvieron en el Congreso «genera situaciones que yo espero que el día de mañana se puedan conversar y que podamos tener a nuestra coalición política unida detrás de un proceso de transformación, de una ruta constituyente».

Concede que «obviamente me hubiera gustado que todo el Frente Amplio estuviese acá. Y no solo el Frente Amplio, las distintas organizaciones: los regionalistas, el PC, o sea mucha gente que yo creo que tiene que estar en este proceso y que también han estado durante mucho tiempo peleando».

Cree, sin embargo, que tendrán el apoyo, dado que «sabemos que lo que está en el acuerdo es muy, muy, muy similar a lo que nosotros hemos planteado en nuestro programa de una asamblea constituyente».

Pauta


A 22 aumentan los muertos en protestas y movilizaciones en Chile

El Gobierno informó que la cifra de fallecidos durante las casi cuatro semanas de protestas en Chile alcanzó las 22 personas, seis de ellas ciudadanos extranjeros.

 

El balance presentado por las autoridades, que registra los hechos ocurridos en las últimas 24 horas, confirma el hallazgo de un cadáver en el interior de un supermercado que fue incendiado en el norte del país.

«Las policías informaron del fallecimiento de una persona, cuyo cadáver fue encontrado calcinado al interior de un supermercado Líder, el que fue incendiado y saqueado en la ciudad de Arica (en la frontera con Perú) durante la noche del 12 de noviembre», explicaron a través de un comunicado.

Con esta actualización la cifra de muertos ya supera la veintena en menos de un mes y del total de fallecimientos, cinco de ellos ocurrieron presuntamente a manos de agentes del Estado, ya sean policías o militares, según el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

En cuanto a los extranjeros que perecieron en el marco de las protestas, tres de los fallecidos son de nacionalidad peruana, dos colombianos y uno ecuatoriano.

Además de las víctimas fatales, según las cifras del ente de derechos humanos, que monitorea las protestas en la calle, hospitales y comisarías, los heridos ya suman 2.209.

Más de la mitad de las lesiones se producen a causa de los disparos de agentes del Estado, siendo los más graves los 209 casos de traumas oculares por los impactos de balines de goma, perdigones o bombas lacrimógenas percutidos hacia el rostro de los manifestantes.

Por su parte, los detenidos son 6.046 hasta la fecha, según el INDH, que ha constatado testimonios de detenciones ilegales, palizas, torturas y violaciones a los derechos humanos de los retenidos durante las protestas.

Por estos motivos, el organismo ha presentado 319 acciones judiciales en favor de 472 víctimas, principalmente querellas contra el actuar de Carabineros.

El alza en el precio del pasaje del metro de Santiago fue la chispa que prendió un estallido social sin precedentes desde el final de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que busca acabar con la desigualdad de un modelo económico neoliberal y garantizar derechos fundamentales como salud, pensiones o educación.

El Economista


INDH prepara una veintena de acciones judiciales por excesos policiales en Lo Hermida

Desde el Instituto Nacional de Derechos Humanos confirmaron que están redactando una veintena de acciones judiciales, principalmente querellas, por presuntos abusos policiales por parte de Carabineros contra vecinos de Lo Hermida, en la comuna de Peñalolén.

Observadores del INDH están desde el martes recogiendo testimonios en la población, entre los que hay denuncias por excesos contra niños, niñas y adolescentes e incluso agresiones a una mujer embarazada en su hogar.

Algunas de las querellas que presentará el organismo serán por apremios ilegítimos y torturas, entre otros delitos, y adelantó que es probable que el número de acciones judicial vaya en aumento.

Estas denuncias «nos han provocado mucha preocupación, sobre todo porque involucran a personas pertenecientes a grupos de especial protección como son niños, niñas, adolescentes, mujeres embarazadas, entre otras, y evidentemente el INDH no se va a quedar de brazos cruzados», aseguró Beatriz Contreras, jefa regional del Instituto.

Por ello, y «sólo con los relatos que hemos levantado entre el martes y miércoles -confirmó-, ya están en proceso de redacción más de 20 acciones judiciales, entre apremios ilegítimos y algunos casos de torturas».

Los vecinos acusan que hay alrededor de 250 personas lesionadas durante manifestaciones e incidentes en el sector, producto de uso excesivo de la fuerza policial, manejo indiscriminado de escopetas antimotines, múltiples casos de lesionados por balines de goma, lanzamiento de gas lacrimógeno a casas que han afectado a menos e incluso lactantes e ingreso a domicilios para realizar detenciones.

La escalada de violencia en Lo Hermida comenzó la mañana del lunes 11, luego de que un grupo de vecinos intentara tomar la Viña Cousiño Macul para exigir soluciones habitacionales.

Una vez que los carabineros desalojaron el terreno, los vecinos denunciaron, a través de redes sociales, que carabineros ingresaron a un block de departamentos para realizar detenciones, lanzaron gases lacrimógenos y cometieron abusos policiales.

En este marco, Carabineros también denunció que hubo al menos ocho funcionarios que resultaron con lesiones luego de que desconocidos atacaran la 43ª Subcomisaría de la comuna, ubicada en avenida Los Presidentes, durante la noche del lunes.

Cooperativa


VOLVER

Más notas sobre el tema