Cuarentena sexista: el 80% de las personas detenidas son mujeres

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Coronavirus: La denominada Ley de protección policial en debate

El primer día de orden de salida diferenciada por género para frenar el coronavirus, el 80 % de detenidos de aquella jornada fueron mujeres que salieron de sus casas cuando no les correspondía hacerlo.

La mayoría de las personas que fueron conducidas a la comisaría argumentaban haber ido a comprar alimentos a pesar de las medidas restrictivas.

También se cerraron bazares, locales de venta de licor, librerías, talleres de mecánica e incluso construcciones clandestinas, todas prohibidas de operar por la ley.

En las intervenciones hay, en algunos casos, desacato a la autoridad y desobediencia, lo que podría generar un panorama de mayor incertidumbre debido a una ley recientemente publicada.

La semana anterior, el presidente del Congreso promulgó la llamada Ley de Protección Policial, norma que textualmente exime de responsabilidad penal al personal policial y de las FF. AA. que en cumplimiento de su función cause lesiones o muerte.

La norma fue inspirada en el caso del efectivo Elvis Miranda, quien disparó y mató a un delincuente durante una intervención.

Una de las principales críticas fue que la ley vulnera el principio de proporcionalidad y que permitiría que los agentes cometan abusos en contra de los ciudadanos.

La Defensoría del Pueblo se ha pronunciado en contra de esta ley porque considera que vulnera el principio de proporcionalidad recogido en la Constitución.

Otros organismos como la Corte IDH y la ONU expresaron su preocupación por esta ley que podría impedir investigar a los responsables de violaciones de derechos humanos.

Por ahora, la norma seguirá vigente mientras dure el estado de emergencia, con todos los riesgos que esto implica.

América TV


En Perú y Panamá el toque de queda es por género

Hombres los viernes, mujeres los sábados: así es el toque de queda por género contra el covid-19 en Perú y Panamá consigna Mónica Vargas de Univisión.

Los gobiernos de ambos países establecieron días distintos de circulación en las calles para hombres y mujeres, con la idea de prevenir la propagación del nuevo coronavirus. Aún está por verse la efectividad de la medida. Esta semana, cientos de hombres y mujeres fueron detenidos en Perú y Panamá por salir los días que no les correspondían.

El abogado Miguel Juape armó junto a su esposa Zulmy la lista de los víveres que necesitaban y salió temprano al mercado más cercano a su casa. No vio las aglomeraciones típicas de las semanas previas a la llegada del coronavirus y se alegró de comprobar que casi todos usaban mascarillas, aunque sean caseras. El panorama era también diferente al de días previos porque solo se veía a hombres comprando.

El presidente peruano Martín Vizcarra había decretado poco antes que para salir a hacer compras de abastecimiento y medicamentos o para ir al banco, hombres y mujeres tendrían que turnarse porque era necesario disminuir aún más la presencia de las personas en las calles ante el incremento del número de contagios por covid-19 en el país.

Al escuchar el anuncio, Miguel y su esposa supieron que tenían que organizarse. Desde que empezó la cuarentena obligatoria en Perú el 16 de marzo, han tratado de salir lo menos posible de su departamento e intentan que sus dos hijas, Kiara y Luciana, de 11 y 4 años, respectivamente, aprovechen bien su tiempo; pero no es fácil. Mientras Zulmy se encarga de los quehaceres y las niñas, él tiene que trabajar vía remota, una modalidad casi inexistente cuatro semanas atrás en el Perú.

Cuando sus vidas eran ‘normales’ iban juntos al mercado el fin de semana. Ahora Miguel tiene que aprovechar el viernes para abastecer el hogar y si se necesita algo extra, su esposa tendrá que salir el sábado para conseguirlo. Ello porque el gobierno de Vizcarra ha dispuesto eso: los hombres solo saldrán los lunes, miércoles y viernes, y las mujeres, los martes, jueves y sábados. Los domingos nadie podría dejar sus casas. Una medida drástica y solo dada en Latinoamérica por Panamá.

“Tratamos de cumplir lo máximo posible con las medidas porque tenemos que apoyar en esto. A veces cuando salgo y veo las calles vacías pienso en mis hijas porque lo que conocíamos como vida normal, no la tendremos más. Su mundo ha cambiado, su futuro me preocupa”, dice Miguel a Univisión Noticias.

Cuando el presidente peruano anunció que hombres y mujeres no podrán estar al mismo tiempo en las calles dijo que el objetivo era lograr que haya menos gente circulando. “Este es un último esfuerzo que pedimos”, dijo y para explicar el porqué de la medida, recurrió a un gráfico en el que se aprecia que cuando se alcance el máximo estimado de contagios previstos, que se espera para la segunda y tercera semana de abril, el sistema público de salud del país solo contará 500 camas de cuidados intensivos para atender a los que más lo necesiten. Antes de la emergencia, solo se tenía 100 camas.

Billie Parker Noticias


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