Alberto Fernández tras una tensa jornada de protesta policial: “La democracia es el único camino»

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Respuesta del Presidente a los policías bonaerenses que llevaron su protesta a Olivos

Por Fernando Cibeira

Luego de una jornada cargada de tensión por la protesta que un grupo de policías bonaerenses trasladó a los alrededores de la quinta de Olivos en actitud sediciosa, el presidente Alberto Fernández anunció la creación de un Fondo de Fortalecimiento Fiscal para la provincia de Buenos Aires que se financiará con un punto de coparticipación que percibía la ciudad de Buenos Aires, calculado en más de 35 mil millones de pesos. Esos recursos servirán para atender las demandas de los policías, cuyo aumento salarial anunciará este jueves el gobernador Axel Kicillof cuando presente su plan de seguridad.

“No todo está permitido”, advirtió el Presidente a los efectivos que rodeaban Olivos con las armas y patrulleros que les provee el Estado. “Puedo entender cualquier reclamo y cualquier demanda, lo que no estoy dispuesto es a aceptar ciertas formas de la demanda que no tienen que ver con la vida democrática”, les dijo junto al gobernador, intendentes, funcionarios nacionales y autoridades legislativas. Para entonces, buena parte de la clase política, gremial, social y de derechos humanos le había manifestado su apoyo por diferentes vías. No todos, claro. El ex presidente Mauricio Macri, por ejemplo, no creyó necesario decir nada.

“Todos queremos ir resolviendo los problemas que la Argentina tiene, pero vamos a hacerlo cumpliendo las reglas de la democracia y respetando la institucionalidad”, remarcó Fernández. “Les pido democráticamente que depongan esta actitud”, insistió. También agradeció los respaldos recibidos durante la jornada de quienes, dijo, entienden que “la democracia es el único camino”.

Se buscó una imagen de fuerte respaldo político junto a Kicillof y su vice Verónica Magario, Santiago Cafiero, Wado de Pedro, Sergio Massa, Máximo Kirchner y un nutrido grupo de intendentes entre los que se destacaban la presencia de opositores como Jorge Macri, Néstor Grindetti, Diego Valenzuela o Gustavo Posse. Luego ellos comentaron que no estaban al tanto del anuncio que haría el Presidente, que implica una reducción de los fondos que la Nación le envía a la Capital desde que se traspasó la Policía, correspondientes a 2,1 punto de coparticipación. Fernández sostuvo que ese cálculo fue un punto más de lo necesario, que ahora derivará a la Provincia.

Aquella decisión, explicaban en Gobierno, la tomó Mauricio Macri por decreto. El Presidente ya le había comentado en marzo al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que evaluaba este cambio, pero las charlas quedaron truncas por la pandemia. La necesidad aceleró la decisión que Fernández justificó en su mensaje con un gráfico que detalló las enormes diferencias presupuestarias que existen entre Capital y provincia. Wado de Pedro se había comunicado unos minutos antes del discurso con Rodríguez Larreta para informarlo sobre la decisión. En un tuit a última hora, el jefe de gobierno porteño reinvindicó la necesidad de una salida institucional para el conflicto policial y anticipó que hoy se referirá específicamente al anuncio. En su entorno dejaron trascender “sorpresa” y no descartaban un recurso judicial.

Fue el cierre de una nueva jornada de reclamos policiales, que tomó un cariz totalmente diferente cuando al foco de protesta principal localizado en el Puente 12 se sumó uno en la quinta de Olivos. Lo grave era que no sólo se salteaba toda la línea lógica que debía seguir el reclamo –la jefatura policial, el ministerio de Seguridad bonaerense y, de última, el propio gobernador– sino que agregaba un factor de intimidación a la figura presidencial, lo que acercaba la protesta a un acto sedicioso. Cuando se juntó el primer grupo de policías, hubo un mensaje desde adentro de la quinta para que se acercaran a conversar si es lo que querían. “Lo hacemos con todos los que vienen a reclamar algo”, explicaban luego cerca del Presidente. Sorprendentemente, recibieron una respuesta negativa.

Fernández y Kicillof compartieron un acto en la Cervecería Quilmes donde además se anunció el relanzamiento de los planes Ahora 12 y Ahora 18. Pero en un tramo de su discurso, el Presidente intercaló un mensaje dirigido a los policías que protestaban en Olivos y que habían rechazado dialogar. “Esto no se resuelve escondidos en patrulleros tocando sirenas, esto se resuelve hablando frontalmente”, dijo. Expresó además su apoyo al gobernador, definiéndose como “dos amigos en la misma causa”. Se lo notaba muy molesto.

Pero después del mediodía llegaron más policías en patrulleros que estacionaron sobre avenida Maipú, en un lateral de Olivos, lanzando en algunos casos consignas desafiantes por televisión. Mayoritariamente, la clase política salió entonces en respaldo al Presidente frente a la temeraria postura de estos grupos policiales. Los gobernadores, la CGT, la CTA, organismos de derechos humanos, universidades, salieron rápidamente a expresarse. Hubo excepciones notorias como un tuit del bloque de diputados de la UCR reclamando que se atendiera las demandas policiales que luego fue borrado. El ex presidente Macri no se expresó, tampoco la titular del PRO, Patricia Bullrich.

El secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, y el vocero presidencial Juan Pablo Biondi salieron de la quinta para invitar personalmente a los policías a conversar. Recibieron una copia del petitorio con sus reclamos pero una nueva negativa a ingresar a Olivos a dialogar. En verdad, no tenían designado a nadie que los representara. Varios de los autoerigidos como supuestos voceros del malestar luego se supo que se trataba de exonerados o sumariados, incluso algunos con denuncias penales por hechos graves.

Desde presidencia y la gobernación mensajearon a los intendentes para que acompañen al Presidente en su mensaje. El dirigente social Juan Grabois convocó a una movilización a las 20 a Olivos en apoyo, Fernández emitió entonces un tuit agradeciendo pero recordando que se atravesaba una pandemia. Grabois entendió y bajó la marcha. En el Gobierno explicaban que la intención era quitarle decibeles al conflicto, no querían ni pensar lo que podría haber sucedido con militantes cara a cara con los policías en Olivos.

En Presidencia calculaban el Fondo de Fortalecimiento Financiero en más del 35 mil millones de pesos para el próximo año. Kicillof anunciará este jueves su plan de seguridad y la recomposición salarial a los policías, que esperan sirva para terminar con la crisis planteada. En cuanto Fernández comenzó su mensaje, los alrededores de la quinta presidencial quedaron despejados pero la protesta en Puente 12 continuaba. Una preocupación que se llevaron de los intendentes de Olivos era saber cómo reaccionarían ahora médicos, municipales, docentes y demás empleados públicos que también reclaman una actualización de sus haberes.

Página 12


Amplio repudio a la protesta policial en Olivos

La presencia de efectivos armados de la Policía Bonaerense en la entrada de la Quinta de Olivos despertó el repudio de casi todo el arco político y social. A excepción del elocuente silencio de algunos referentes de Juntos por el Cambio, como Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, funcionarios oficialistas, opositores, dirigentes sindicales y líderes sociales se pronunciaron en contra de la protesta policial en la puerta de la residencia donde vive Alberto Fernández e insistieron en la importancia de defender la institucionalidad democrática.

Mientras los efectivos de la Bonaerense comenzaban a reunirse en la entrada de la residencia presidencial, legisladores del Frente de Todos, organizaciones sindicales, referentes sociales y funcionarios nacionales salieron a repudiar las protestas. “No es ético aprovechar la pandemia para profundizar las crisis. El gobierno nacional no se va a hacer el distraído. Los problemas se resuelven hablando frontalmente y con sensatez”, planteó, en un tono más apaciguador, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero.

El Partido Justicialista de la Ciudad de Buenos Aires expresó su “total repudio y profunda preocupación” frente a la presencia de uniformados armados en la entrada de la Quinta de Olivos, “una actitud de amedrentamiento que no se puede aceptar en democracia”. “Las armas que les otorga el Estado son para cuidar a los argentinos y las argentinas y no para buscar la alteración del órden democrático”, señaló el PJ porteño. Y agregó: “Acompañamos y apoyamos al Presidente de la Nación y al gobernador de la porvincia de Buenos Aires quienes vienen afrontando no solo la crisis generada por la pandemia sino la que generó Juntos por el Cambio en los últimos cuatro años”.

Les intendentes del Frente de Todos de la tercera sección electoral también se sumaron al rechazo a través de un comunicado titulado “El reclamo es justo, el método no”, en el que consignaron que, si bien “se puede comprender el reclamo salarial de las fuerzas de seguridad”, la actitud de rodear la quinta presidencial “es un acto de amenaza y amedrentamiento contra el gobierno.

Los sindicatos también se sumaron al repudio y manifestaron su solidaridad con las autoridades. La CGT emitió un comunicado en el que condenó “el exceso del legítimo reclamo” de los policías bonaerenses y advirtió que “la defensa de los derechos laborales de los integrantes de esa fuerza se transformó con el paso de las horas en una real amenaza para el normal funcionamiento del Estado”. Las dos CTA también denunciaron la metodología de las protestas y exhortaron a la Policía Bonaerense a “no convertir el reclamo en una especie de acto sedicioso”, en palabras de su titular, Hugo Yasky. El Smata aseveró que las manifestaciones policiales bonaerenses “no restan importancia a la dignificación laboral que procuran y por la cual luchan todos los trabajadores, pero el modo, las condiciones y la impulsiva y masiva comunicación adrede y peyorativa no es una casualidad”.

Por su parte, el líder social del MTE Juan Grabois convocó a una marcha de velas hacia la Quinta de Olivos bajo la consigna “Paz y Democracia”, pero luego retiró el llamado ante el pedido de Alberto Fernández.Desde Juntos por el Cambio no hubo, esta vez, comunicado expresando preocupación por la estabilidad institucional. Dos de sus principales referentes, la ex gobernadora María Eugencia Vidal y el ex presidente Mauricio Macri, no hicieron –al menos hasta el cierre de esta edición– ningún comentario.

Quien sí se pronunció fue fue el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta: “No es la forma ni el lugar. Es inadmisible la presencia de efectivos de la policía de la provincia de Buenos Aires en la quinta presidencial de Olivos. El reclamo salarial debe ser canalizado en el ámbito que corresponda. El diálogo es el camino”, tuiteó Larreta, unas horas antes del anuncio de Alberto Fernández que luego generó otro intercambio con dirigentes de la oposición por la coparticipación.

Hubo también mensajes de repudio por parte de distintos dirigentes.. “A favor de las legítimas reivindicaciones de la Policía Bonaerense. En contra del reclamo frente a la Quinta de Olivos. No es el lugar”, tuiteó el polémico diputado cambiemita Fernando Iglesias. El vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, el senador Martín Lousteau, el diputado Facundo Suárez Lastra, entre otros legisladores de Juntos por el Cambio, también repudiaron la manifestación de la policía frente a la residencia presidencial, aunque no reaccionaron con tanto entusiasmo ante el anuncio presidencial.

La respuesta orgánica del radicalismo al acuartelamiento policial fue, por el contrario, contradictoria y polémica. La primera reacción oficial de la UCR fue la de publicar un comunicado a favor de la revuelta policial, exigiéndole al gobierno nacional que atendiese los reclamos de la policía. “El reclamo salarial tiene que ser un derecho de todos los trabajadores. El de la Policía Bonaerense es legítimo y entendible. No se lo puede vincular con una operación política de desestabilización”, declaraba Alvaro de Lama.

Los organismos de derechos humanos

Los organismos de Derechos Humanos, por otro lado, expresaron una «enorme preocupación» al señalar que es un «acto de gravedad institucional» y que exige «su absoluta condena». Entre los firmantes figuran Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, H.I.J.O.S capital y la Asamblea Permantente por los Derechos Humanos, entre otros.

Universitarios y científicos

Por su parte, las rectoras y los rectores de las universidades públicas -agrupados en el Consejo Interuniversitario Nacional- rechazaron la presencia de las fuerzas policiales armadas en la quinta presidencial. «Hace ya casi cuarenta años que nuestro país eligió vivir definitivamente en democracia y, por lo tanto, son inaceptables las conductas que vayan en contra de las formas convenidas por toda la sociedad para resolver cualquier conflicto en un estado de derecho», expresaron en un comunicado. El rector de la Universidad de Buenos Aires firmó una resolución específica para sumarse al rechazo.

En su declaración la autoridades universitarias manifiestan su «preocupación y rechazo por la presencia de fuerzas policiales armadas y haciendo uso de los elementos que el propio Estado les brinda frente a la quinta presidencial de Olivos y la casa del Gobierno de la provincia de Buenos Aires». El rector de la UBA, Alberto Barbieri, firmó una resolución de adhesión a la declaración del CIN.

El Grupo CyTA emitió, por su parte, un documento en el que advierte sobre la existencia de una «campaña de desestabilización» contra el gobierno de Alberto Fernández, en el que vincula las protestas de la Policía Bonaerense con la decisión de la Juntos por el Cambio de oponerse a sesionar virtualmente en el Congreso y su rechazo al impuesto a las grandes fortunas, así como su «incitación a desobedecer mínimas normas sanitarias que buscan proteger la vida de los argentinos».

Página 12


Kicillof anunciará la suba salarial para los policías junto a intendentes del conurbano

Por Jorgelina Naveiro

El anuncio para la Policía bonaerense llegará este jueves. La suba salarial será comunicada por el gobernador Axel Kicillof, como parte del plan propio de seguridad para la provincia, y con el refuerzo económico aportado por el Fondo de Fortalecimiento Fiscal anunciado por el presidente Alberto Fernández.

El mandatario realizará el anuncio en la Gobernación junto a intendentes y al ministro de Seguridad, Sergio Berni, según confirmaron fuentes oficiales. El objetivo es que la mejora desactive la protesta policial que ya lleva tres días y que ayer escaló a niveles impensados cuando los policías rodearon con armas y patrulleros la Quinta de Olivos.

El incremento, en principio, superaría el 30% de poder adquisitivo perdido en los cuatro años del mandato de María Eugenia Vidal. El jefe de Gabinete, Carlos Bianco, anunció que habría un «aumento importante».

En el petitorio que los uniformados entregaron al jefe de la Policía, Daniel García, reclamaron una suba del 56% para quienes están en la calle y del 64% para los administrativos y técnicos, con el objetivo de que quien ingresa a la fuerza tenga un sueldo de bolsillo de 60 mil pesos. También pidieron un incremento de las horas CORES (extra) de 40 a 189 pesos y del plus que se paga por mantenimiento de uniforme, entre otros puntos.

En el gobierno se encargaron de subrayar que «no hay negociación» con la fuerza para definir el aumento que se dispondrá por decreto. «No se discuten paritarias con la Policía», señalaron en relación a que la fuerza no está sindicalizada y explicaron que Kicillof fue quien afinó los números junto al ministro de Hacienda y Finanzas, Pablo López, y el resto del equipo económico. El jefe de Gabinete, Carlos Bianco, y la ministra de Gobierno, Teresa García, en tanto, se encargaron de la comunicación con los intendentes para garantizar que no se resintiera la seguridad por las protestas. Berni estuvo al margen y sólo participó en el plan y el uso que se hará de los recursos.

Los recursos para pagar el incremento policial saldrán de las arcas bonaerenses y del Fondo de Fortalecimiento Fiscal que anunció el Presidente este miércoles y que consiste en la retracción de un punto de coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires que recibió en 2016 por el traspaso de la Policía Federal. En el entorno de Kicillof estiman que ese punto que ahora pasará a la Provincia representa alrededor de 36 mil millones de pesos.

Tiempo Argentino


‘Esto es traición’: la reacción de Rodríguez Larreta al anuncio del presidente

El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodriguez Larreta, se habría sentido «traicionado» por el presidente Alberto Fernández cuando le comunicaron sobre la decisión referente al retiro de fondos de coparticipación.

«Esto es una traición, no me podés avisar 5 minutos antes», le habría dicho Rodríguez Larreta al ministro del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro, cuando este se comunicó con el mandatario porteño poco antes del anuncio oficial para anticiparle la determinación. La charla fue revelada por el periodista Marcelo Bonelli en TN.

Públicamente, Larreta no respondió directamente al anuncio del presidente de quitarle un punto de coparticipación. Por el contrario, dijo que «en un momento de tanta angustia para los bonaerenses», reafirmaba su «convicción de que el conflicto de la Policía debe solucionarse por vías institucionales».

«Mañana me voy a referir al anuncio del presidente», agregó sin decir más, en su cuenta de Twitter.

«En un momento de tanta angustia para los bonaerenses, reafirmo mi convicción de que el conflicto de la Policía debe solucionarse por vías institucionales. Mañana me voy a referir al anuncio del presidente», dijo Rodríguez Larreta en Twitter.

El Presidente explicó que le sacará un punto de la coparticipación a la Ciudad para destinarlos a Buenos Aires, con el propósito de financiar el aumento a la Policía Bonaerense, en medio de una jornada de extrema tensión con protestas con patrulleros en Olivos. Los fondos -unos 35.000 millones por año- que hoy usa la Ciudad para financiar parte del funcionamiento de la Policía Metropolitana, provendrán del porcentaje de Coparticipación que le cedió a la Ciudad el gobierno de Mauricio Macri cuando transfirió la Policía Federal a la Capital Federal.

Fernández dijo que «nadie se puede sorprender» de su decisión, tras señalar que había hablado varias veces del tema con Rodríguez Larreta. Sin embargo, la discusión por la coparticipación, que habían empezado a principio de año, se congeló en marzo último con la emergencia sanitaria y ahora se reflotó en esta decisión presidencial.

Perfil


Salarios policiales: radiografía de un conflicto que viene de lejos

Por Jorgelina Naveiro

Los bajos sueldos de la policía bonaerense son un reclamo que se repite con cada gestión y el espejo en el que se miran es siempre el mismo: el de la policía porteña. El gobierno de Axel Kicillof admitió que los sueldos de la fuerza tienen un retraso del 30%, pero los efectivos reclaman una suba del 56%. Pretenden que lleve el mínimo de bolsillo a los casi 60 mil pesos, similar al que cobran hoy sus pares de la Ciudad. Este miércoles llegaría la propuesta oficial.

El incremento salarial que rige en la actualidad es de noviembre de 2019 y llevó el salario del oficial ingresante a 34 mil pesos. A comienzos de este año, ya en la gestión Kicillof, la fuerza recibió una suba de 4 mil pesos-en dos cuotas en marzo y abril-a cuenta del futuro aumento 2020. Pero la pandemia paralizó la negociación salarial con el resto de los estatales y no hubo todavía otro incremento.

Como la policía no está sindicalizada y no puede hacerlo por su «esencialidad», los aumentos de sueldo siempre son otorgados por el Ejecutivo en base a lo que negocia con los estatales nucleados en la ley 10.430, es decir, los administrativos. Así fue también durante el gobierno de María Eugenia Vidal.

En conferencia de prensa, el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, aseguró hoy que «en los últimos 4 años el atraso fue de un 30% y eso hay que recomponerlo». Y adelantó que están readecuando las partidas, pero evitó hablar de porcentajes. La ministra de Gobierno, Teresa García, confirmó esta noche que mañana a primera hora estará la propuesta de aumento.

En el Sindicato Policial Bonaerense (SIPOBA), que los nuclea, pese a no tener personería gremial, hablan de un retraso del 36%. En el petitorio que entregaron el lunes al jefe de la Policía, Daniel García, le plantearon la necesidad de un incremento del 56% para los policías de calle (subescalafón comando y general) y del 64% para los administrativos, técnicos y profesionales. Además de la suba de las horas Cores (extra) de 50 a 189 pesos; el pago de las horas polad (policía adicional) en tiempo y forma; planes de vivienda para el personal; la no obligatoriedad a afiliarse al IOMA, y la provisión del uniforme y suba del plus que se paga por mantenimiento de uniforme.

La suba que pretenden busca la equiparación con los sueldos de la policía porteña. Hoy un agente que ingresa a la fuerza tiene un haber de alrededor de 58 mil pesos, contra los 38 mil que ganan en la Provincia. Además de cobrar más, trabajan menos: tienen un régimen horario de 6 horas y no de 8 horas.

En la campaña de 2015, cuando buscaba llegar a la gobernación, María Eugenia Vidal le prometió a los policías bonaerenses que igualaría sus sueldos con los de la Policía Metropolitana. Pero pese al slogan «vamos a cuidar a los que nos cuidan» y a los votos que consiguió de muchos integrantes de la fuerza, la equiparación nunca llegó.

En marzo de 2016, en el arranque de su gobierno, los efectivos amenazaron con ir a un paro. El entonces ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, les ofreció una suba del 25% a pagar en dos cuotas, abril y julio. En ese momento, la diferencia salarial era de 12 a 17 mil para el cargo más bajo, una brecha que se fue ampliando a lo largo de su mandato hasta llegar al 55%.

La pandemia agudizó el problema. Los policías son personal esencial en el marco del aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto por el gobierno. Vienen acumulando, como otros sectores, más de 7 mil contagios. El conflicto que se inició en Misiones y terminó con una suba importante ayudó a definir la protesta que comenzaron anoche en las puertas de la residencia oficial del Gobernador, en La Plata, y en 27 distritos de la provincia. En Misiones el gobierno les dio una suba que llevó los sueldos de 28 mil hasta el monto de una canasta de pobreza, alrededor de los 44 mil.

El anuncio de una suba «importante» para la Bonaerense le abrió otros frentes de conflicto a Kicillof. Los estatales, los médicos, los judiciales y hasta un sector de los docentes pusieron el grito en el cielo por el aumento a la fuerza, ofrecido tras la protesta, y redoblaron el reclamo para que el Ejecutivo reanude las paritarias.El anuncio de una suba «importante» para la Bonaerense le abrió otros frentes de conflicto a Kicillof. Los estatales, los médicos, los judiciales y hasta un sector de los docentes pusieron el grito en el cielo por el aumento a la fuerza, ofrecido tras la protesta, y redoblaron el reclamo para que el Ejecutivo reanude las paritarias.

Tiempo Argentino


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