Hugo Chávez y el comienzo del siglo XXI – Por Laura iturbide, especial para NODAL

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Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de Nodal. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.

Por Laura iturbide *

El siglo XX fue denominado por Eric Hobsbawn como el siglo corto, porque comenzó en 1914 con la primera guerra mundial y finalizó en 1991 con la disolución de la Unión Soviética (URSS), en el fin de una disputa entre dos gigantes del sistema internacional, Estados Unidos y la URSS.

No vamos a discutirle cuándo termina el siglo XX al escritor de mirada panorámica sobre los procesos mundiales, lo que sí vamos a afirmar es que el siglo XXI comienza con la asunción presidencial de Hugo Chávez en Venezuela en febrero de 1999, porque su presencia política deja atrás la mirada apocalíptica de un futuro incierto (que caracterizó al siglo anterior), y dinamiza un proceso de integración regional con mejoras para los pueblos suramericanos, en los años que siguieron.

Hobsbawn sobre el siglo pasado dice: “…el siglo finalizó con un desorden global de naturaleza poco clara, y sin ningún mecanismo para poner fin al desorden o mantenerlo controlado”, y los Estados latinoamericanos en las últimas décadas del siglo corto, fueron la muestra más cabal de esa descripción con crisis de deuda externa, economías recesivas y tasas de desempleo crecientes.

El comienzo del siguiente siglo responde a un cambio de era, y el proceso que inicia Hugo Chávez no solo rompe con el sistema bi-partidista excluyente conservador conocido como puntofijismo en Venezuela, además pone fin a los individualismos suramericanos, impulsando aquello que conocimos como la Década Ganada.

Durante los primeros años del nuevo siglo, Brasil con Lula Da Silva, Argentina con Néstor Kirchner, Bolivia con Evo Morales, Ecuador con Rafael Correa, y luego otros Estados de la región, se acercan a Venezuela y a Cuba, para pensar salidas soberanas, re-distributivas y pacíficas, ante las crisis políticas y económicas que dejó el siglo pasado[1].

La Década Ganada tuvo sus limitaciones y contradicciones, incluso puede acusarse a todo el proceso de no haber conseguido eludir la trampa de la primarización de las economías latinoamericanas, pero lo cierto es que el un impacto fue inédito en la vida de sus ciudadanas y ciudadanos, mejorando la redistribución del ingreso[2], en el continente más desigual del mundo.

La asunción presidencial de Andrés Manuel López Obrador en México en 2018, de Alberto Fernández en Argentina en 2019, de Lucho Arce en Bolivia en 2020, y las elecciones presidenciales en Ecuador en los próximos días, auguran nuevas integraciones regionales luego de los gobiernos tardo neoliberales de los últimos años. Y, en tiempos de pandemia COVID -19 con nuevos actores y actoras colectivas como los feminismos y los ambientalismos, son posiblesotras formas de colaboración y solidaridad en la región.

No sabemos cómo sigue el siglo en las próximas décadas, pero sí podemos afirmar que Hugo Chávez abre un tiempo político cuando le puso nombre a las desigualdades imperialistas y coloniales desde la presidencia de un país, re-valorando las identidades suramericanas diversas con la política como motor de cambio.

Sin Hugo Chávez asumiendo la presidencia de Venezuela en 1999, el futuro habría continuado como un callejón sin salida, como lo fue a finales del siglo XX y los gobiernos actuales no tendrían ese pasado reciente que demostró que, con unidad y soberanía entre los Estados, el crecimiento y la igualdad son escenarios posibles en Latinoamérica.

Notas

[1]Venezuela de 97,974 mil millones en 1999 a 371,337 mil millones en 2013 – Brasil de 507,963 mil millones en 2002 a 1,775 billones en 2015 – Argentina de 127,587 mil millones en 2003 a 583,169 mil millones en 2015 – Bolivia de 9,549 mil millones en 2005 a 33,197 mil millones en 2015 – Ecuador de 32,433 mil millones en 2005 a 100,872 mil millones en 2015, según cifras en dólares indicadas por el Banco Mundial.

[2]Sobre el coeficiente de Gini, publicado en la página oficial de Banco Mundial: Venezuela: 50 en 2003 – 46.9 en 2006 (falta información hasta 2013), Brasil: 58 en 2003 – 52 en 2013, Argentina: 53 en 2003 – 42 en 2013, Bolivia: 58 en 2005 – 48 en 2013, Ecuador: 54 en 2006 – 47 en 2013.

* Politóloga, docente de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN), Argentina


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