Cumbre del Mercosur: cancilleres de Argentina y Brasil pidieron fortalecer el bloque y hoy se reúnen los presidentes

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Cumbre de cancilleres del Mercosur: Argentina y Brasil pidieron fortalecer el bloque regional

Por Eduardo Menegazzi

Mientras Argentina y Brasil insistieron en la necesidad de fortalecer el Mercosur apostando al consenso y a la unidad, Uruguay expuso que existe una “profunda e histórica vocación de integración regional a la cual nunca renunciaremos, como tampoco renunciaremos a una vocación histórica de apertura e inserción amplia a nivel internacional”. Fue una clara muestra de la intención uruguaya de concretar acuerdos extra zona, especialmente con China, sin necesidad del respaldo de sus socios comerciales. Este viernes será la Cumbre de Presidentes del bloque regional a partir de las 10 de la mañana.

El canciller argentino, Santiago Cafiero, participó en la LIX Reunión del Consejo del Mercado Común (CMC) de los Estados Partes del Mercosur y Bolivia, junto a sus pares de la región -de Paraguay, Euclides Acevedo; de Uruguay, Francisco Bustillo; de Brasil, Carlos França, presidiendo la reunión desde Brasilia- y con el viceministro de Comercio Exterior e Integración de Bolivia, Benjamín Blanco, como invitado.

Cafiero afirmó: “El bloque que debemos consolidar en el futuro venidero se hará sobre la base de una clara sinergia entre los temas internos y la agenda externa del bloque. El perfeccionamiento del proyecto de integración regional es el resultado del consenso y debe contemplar una política comercial común que inserte adecuadamente a nuestros países en el mundo”.

Sobre uno de los temas más conflictivos que se plantearon en las últimas reuniones del Mercosur, la rebaja del Arancel Externo Común (AEC), el titular del Palacio San Martín afirmó: “Es un elemento constitutivo de nuestro proceso de integración. Esto significa que, cuando nos propusimos modificarlo, emprendimos un diálogo focalizado en la esencia misma del proceso de integración. Nos encontramos ahora en medio de esta negociación y todos los socios hemos hecho un gran esfuerzo para lograr un acuerdo. Las condiciones están dadas para lograrlo, para contar con un AEC más adecuado a nuestra realidad actual y para consolidar la unión aduanera”.

La discusión sobre la reducción o eliminación del AEC ha sido desde hace varios meses un tema recurrente. Argentina y Brasil acordaron en noviembre una rebaja del 10% sobre una serie de productos que no afecte principalmente a los sectores industriales, pero Uruguay no suscribió todavía ese acuerdo y pide profundizarlo.

El jefe de la diplomacia argentina estuvo acompañado en su presentación por los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Cecilia Todesca Bocco; y la subsecretaria del Mercosur y Negociaciones Económicas Internacionales, Rossana Surballe.

França, por su parte, resaltó la posición del gobierno de Jair Bolsonaro con un apoyo a la tarea conjunta del mercado común regional: “Debemos enfrentar como bloque la pérdida del dinamismo e intercambios comerciales que ha sucedido. Esto resalta la relevancia e importancia del bloque en los sectores productivos y la necesidad de que debemos transmitir a los pueblos que representamos, esta idea de que el bloque es que puede traer beneficios sociales y económicos muy concretos”.

Además, el canciller brasileño puso en valor los 30 años de la integración más estratégica que tiene América latina como es el Mercosur, instó a “seguir trabajando” y adelantó que se iban a aprobar los acuerdos alcanzados por el bloque con República Dominicana e Indonesia.

Paraguay, que asumirá la presidencia pro-témpore del Mercosur por los próximos seis meses, se comprometió a apuntar sus esfuerzos en conseguir “más y mejor Mercosur” y que intentarán la construcción de “un diálogo franco y constructivo” entre los países miembros.

“Es importante que esta agenda contemple los intereses exportadores de todos los socios y de nuestros sectores productivos. Para nuestros países, el crecimiento de las exportaciones es fundamental para el fortalecimiento de las economías, el empleo y el tejido productivo y social. Por eso aguardamos la conclusión de las negociaciones ya existentes (Unión Europea y EFTA), pero seguimos mirando de manera estratégica nuevos escenarios”, enfatizó.

Cafiero hizo un balance de los logros y desafíos del bloque, y destacó que “para la Argentina, el Mercosur es el principal instrumento de inserción económica internacional y constituye una verdadera política de Estado. Es el camino elegido por nuestro país para relacionarse con el mundo, y es uno de los procesos de integración más exitosos en América Latina, que en 2021 cumplió 30 años. La integración regional es un proceso que trasciende los tiempos de un gobierno”.

Luego, resaltó el trabajo de Brasil en los últimos seis meses: “Fue exitoso, y permitió seguir avanzando en la agenda de integración para dar continuidad a nuestros compromisos internos y externos”. También puntualizó: “El grueso del comercio entre los socios del bloque es de productos industrializados. Esto ha sido posible gracias a las economías de escala y de especialización que se obtuvieron al ampliar el mercado al que acceden nuestras empresas. Es uno de los grandes logros del Mercosur y de los acuerdos de libre comercio con casi todos los países de la región. El bloque también lidera las exportaciones regionales de Servicios Basados en Conocimiento”.

“Es importante que esta agenda contemple los intereses exportadores de todos los socios y de nuestros sectores productivos. Para nuestros países, el crecimiento de las exportaciones es fundamental para el fortalecimiento de las economías, el empleo y el tejido productivo y social. Por eso aguardamos la conclusión de las negociaciones ya existentes (Unión Europea y EFTA), pero seguimos mirando de manera estratégica nuevos escenarios”, enfatizó.

“Hemos hablado con nuestros sectores productivos para explicarles nuestras propuestas y tomar en cuenta sus sugerencias. Tenemos un acuerdo sobre las modificaciones que deseamos, reduciendo los aranceles de materias primas e insumos que necesitamos para producir y atendiendo a los requerimientos de todos los socios. Las demoras y dilaciones entrañan el riesgo de hacer fracasar una negociación que nos tomó varios años, lo que tendría consecuencias impredecibles para un tema de tanta importancia” concluyó.

Infobae


Fernández vuelve a otra cumbre del Mercosur, distanciado de Bolsonaro y Lacalle

Por Ezequiel Chabay

Como ocurre cada seis meses, los presidentes de los Estados parte del Mercosur volverán a verse las caras, pero una vez más a través de pantallas. La pandemia de coronavirus que azotó al mundo y con particular dureza a la región obligó a discontinuar los encuentros presenciales. Pero en la «salida» de la pandemia -como se empeñan en decir los gobiernos- la virtualidad ha sido la excusa perfecta para evitar encuentros incómodos, y postergar discusiones inevitables que, hasta ahora, continúan sin solución a corto plazo.

Pese a programar originalmente un encuentro presencial en Brasilia, Jaír Bolsonaro decidió mudar al formato virtual luego de corroborar que su principal competidor para las elecciones presidenciales de 2022, Luiz Inácio «Lula» Da Silva, sería recibido con honores y una Plaza de Mayo desbordante con motivo del Festival de la Democracia que organizó el Gobierno el pasado viernes 10 de diciembre. Al excapitán del Ejército le enfureció semejante apoyo, que la vicepresidenta Cristina Kirchner no se empeñó en ocultar.

Pero lo del viernes no fue la única jugada en asuntos de política interior de otros países. Fernández recibió esta semana en su despacho al intendente del departamento uruguayo de Canelones, Yamandú Orsi. ¿Qué hace un jefe de Estado con un alcalde de un país vecino?

Orsi es algo más: milita en el Frente Amplio, en la línea del expresidente José «Pepe» Mujica, y aspira a pelear la presidencia de la Banda Oriental en 2024, contra quien sea el candidato ungido por el actual presidente, Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional, de centroderecha. Un gesto que en Montevideo claramente no agradó.

APUESTA AL FORTALECIMIENTO INTERNO

Así las cosas, el semestre que pasó en la unión aduanera dejó magros resultados. No se logró avanzar en la reducción consensuada del Arancel Externo Común (AEC), pese a que el país más reticente, la Argentina, ofreció una propuesta que cuadró con los intereses de Brasil y su ministro de Economía ultraliberal, Paulo Guedes. Allí, el impasse vino de la mano de Uruguay, que resiste un acuerdo hasta tanto el bloque le dé carta blanca para iniciar negociaciones comerciales por su cuenta con terceros países, vulnerando una norma fundamental del bloque.

Tampoco se logró consensuar una respuesta conjunta a los desafíos sanitarios y de otro corte que trajo la pandemia de Covid-19, al punto que las fronteras entre la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay continúan parcialmente bloqueadas. Tampoco se logró consensuar la reanudación de negociaciones externas, con países y bloques. Para poner la frutilla al postre, tampoco se reunió en vísperas de la Cumbre de Presidentes el Grupo del Mercado Común (GMC), que es el órgano ejecutivo del bloque.

En vísperas de la cita presidencial, los cancilleres de los cuatro países mantuvieron una videoconferencia. Por el lado argentino, Santiago Cafiero llamó a impulsar los flujos comerciales intrazona, incorporar tecnología para aumentar la resiliencia de los sistemas de salud, y sumar esfuerzos para tener «una clara sinergia entre los temas internos y la agenda externa del bloque». Fue un dardo envenenado al Uruguay, al que se le insistió indirectamente con respetar la regla del «consenso» y la «política comercial común».

Con la reforma del AEC en pausa, Cafiero advirtió que «las demoras y dilaciones entrañan el riesgo de hacer fracasar una negociación que nos tomó varios años, lo que tendría consecuencias impredecibles para un tema de tanta importancia».

El Gobierno se quedó conforme con encontrar sintonía con Brasil y Paraguay, que asumirá ahora la presidencia rotativa del bloque, y festejó el arrinconamiento al que va Uruguay de «apertura e inserción amplia a nivel internacional», en palabras de su canciller, Francisco Bustillo.

Cronista


Cumbre del MERCOSUR: Uruguay insistirá en necesidad de flexibilización y apertura al mundo

Este viernes se desarrollará una nueva cumbre de presidentes del MERCOSUR, que en esta oportunidad volverá a ser virtual. Como es habitual, el encuentro comenzó este jueves con la reunión del Consejo del Mercado Común, que está integrado por los ministros de Relaciones Exteriores y de Economía de los países miembro.

Previo a la nueva cumbre, el presidente Luis Lacalle Pou, insistió en la necesidad de que el bloque regional se modernice y flexibilice, y se refirió a las negociaciones que Uruguay mantiene con China sobre un posible Tratado de Libre Comercio.

Lacalle Pou recordó que Uruguay tomó la decisión y se la comunicó a los presidentes y a los cancilleres de los países del MERCOSUR antes de hacerla pública.

“Venimos avanzando bien” en el estudio de factibilidad de un TLC con China, afirmó el mandatario en base a un documento preliminar elaborado por la Cancillería uruguaya.

“Vamos a la cumbre tranquilos, con un agregado de este último mes que Brasil tomó la decisión de bajar su Arancel Externo Común”, dijo Lacalle Pou. En ese sentido, sostuvo que “el MERCOSUR necesita modernizarse”.

“Pertenecemos a la quinta región más proteccionista del mundo y la cosa así no camina. Si no camina para los grandes, menos camina para los chicos. El Uruguay necesita abrirse al mundo”, enfatizó Lacalle Pou.

Subrayado

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