GUERRA NACIONAL DE CENTRO-AMÉRICA contra la invasión extranjera. BATALLA DE SAN JACINTO: preámbulo de la victoria
Por Francisco Javier Bautista Lara
14 de septiembre 1856 – 2025: A 169 años.
1.- La Guerra Nacional , mejor decirle: Guerra Nacional de Centro América, es el episodio histórico ocurrido en el territorio nicaragüense entre el 12 de septiembre de 1856 y el 5 de mayo de 1857, durante 235 días, es la primera GUERRA DE LIBERACION NACIONAL de la historia centroamericana , porque rescató la soberanía nacional y la independencia usurpada por los invasores extranjeros de William Walker en el empuje expansionista de los Estados Unidos de América.
Las guerras de liberación nacional en Nicaragua, para rescatar y/o preservar la soberanía y la independencia nacional son:
- Resistencia nacionalista y anti-interventora que encabezó a Benjamín Zeledón en contra de la invasión norteamericana en 1912.
- Lucha Antiimperialista por la Defensa de la Soberanía Nacional que lideró Augusto C. Sandino con el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua entre mayo de 1927 y febrero de 1933.
- Lucha por la Liberación Nacional de Nicaragua liderada por el FSLN 1961-1979.
- La Defensa de la Revolución Popular Sandinista : defensa de la soberanía, la independencia y la autodeterminación de Nicaragua, desde julio 1979…
2.- Es Guerra Nacional de Centroamérica por la liberación nacional porque prevalecía en el imaginario colectivo y en la norma jurídica el concepto de Centroamérica como nacionalidad , desde la visión progresista liberal y unionista a pesar de la oposición conservadora separatista y localista. La victoria de Centro América en la Guerra Nacional al expulsar a los filibusteros que invadieron Nicaragua y amenazaban con expandirse en Centro América, reafirma la independencia y la soberanía .
La INDEPENDENCIA vista como proceso, es éste triunfo la cuarta independencia :
- la primera fue proclamada en Guatemala el 15 de septiembre de 1821;
- la segunda, el 1ro. de julio de 1823, con la República Federal de Centro América al extinguir el efímero imperio mexicano de Agustín Iturbide;
- la tercera, el 30 de abril de 1938, cuando Nicaragua se declaró estado soberano e independiente , llevó a la disolución de la Federación de Centro América, aunque sin renunciar a la aspiración unionista del pacto federal.
- La quinta fue el triunfo de la Revolución Popular Sandinista en julio de 1979
3.- La Batalla de San Jacinto ocurrió en la mañana del domingo 14 de septiembre de 1856, es la operación militar más conocida y conmemorada de la historia nacional a pesar de que no fue por el volumen de fuego, la cantidad de tropas y la duración, la más grande. Fue una acción victoriosa, heroica y patriótica para la defensa de la nación, en la encrucijada decisiva que definirá el rumbo de los acontecimientos, frente a la expansión filibustera que amenazaba la independencia centroamericana, en la posición estratégica de la hacienda de San Jacinto, a 15 kilómetros de Tipitapa, para frenar el avance hacia el norte e impedirles el suministro de víveres a los invasores norteamericanos que ocupan Granada desde el 13 de octubre de 1855.
4.- El coronel José Dolores Estrada Vado , al frente de una de las cuatro compañías del recién formado Ejército del Septentrión (abril 1856, juraron combatir a los filibusteros; lema “Somos sangre de Diriangén”), bajo orden del Gral. Tomás Martínez, líder legitimista, llegó a San Jacinto con 100 hombres el 29 de agosto de 1856.
5.- El 5 de septiembre unos 120 filibusteros atacaron a la tropa acantonada en la hacienda y, después de dos horas de escaramuza, huyeron dejando a seis de sus muertos. Los patriotas perdieron a un cabo primero y algunos heridos de poca gravedad. Ante la amenaza de los invasores, el 11 de septiembre, Estrada recibió, enviados por Martínez y el Gral. Fernando Chamorro, el refuerzo de 60 indios flecheros al mando del Capitán. Francisco Sacasa. Los indígenas matagalpas de Matapalo, San Pablo y Yucul llegaron a pie desde más de 100 kms. de distancia.
6.- El 14 de septiembre, según parte de guerra de Estrada enviada al “General en Jefe del Ejército Libertador de la República” (no existía), -fue recibido por el Gral. F. Chamorro-, da cuenta del ataque durante cuatro horas (7 – 11 am) de 300 filibusteros, en el que los nicaragüenses iniciaron en desventaja pero el heroísmo de los combatientes, en el que menciona la pedrada de Andrés Castro para derribar a uno, la maniobra de flanquearlos por la izquierda y la retaguardia para sorprenderlos y la desbandada de las yeguas que soltaron de los corrales lo que hizo pensar a los atacantes que se acercaba la caballería, provocando que salieran “despavoridos y en terror”. Dice: “el triunfo adquirido en este día sobre los aventureros”. Los atacantes gritaban “Hurra Walker”, los defensores decían “¡Viva Martínez! ¡Viva Nicaragua!”.
7.- William Walker en su libro La Guerra en Nicaragua (1860), sobre la batalla del 14 de septiembre dice: “La presencia del enemigo en San Jacinto era un serio inconveniente para el abasto de víveres, y cuando fue conocida en Granada, un gran número se presentó voluntariamente para ir a desalojar a los legitimistas de la casa que ocupaban” … “convino en que se organizase un cuerpo de voluntarios para un ataque sobre San Jacinto”… “los voluntarios eran en su mayor parte americanos que habían formado parte del ejército”… “Salieron de Granada en la tarde del 12 de septiembre, y pasando por Masaya, llegaron a Tipitapa en la mañana del 13. Allí ofrecieron el mando de la expedición al Tnte. Cnel. Byron Cole, que había ya recorrido varios puntos de Chontales en busca de ganado para el ejército…” “segundo en el mando fue nombrado Wiley Marshall, ciudadano de Granada…” “Cole y su columna llegaron a la vista de San Jacinto como a las 5 de la mañana del domingo 14 de septiembre. La casa estaba bien colocada para la defensa sobre una pequeña elevación que dominaba el terreno a su alrededor” … “Cole hizo alto por algunos minutos para arreglar su plan de ataque; y dividiendo su fuerza en tres cuerpos, dio el mando del primero a Roberto Milligan, ex teniente del ejército, el del segundo al mayor O`Neal, y el del tercero al Cap. Watkins. El ataque debía hacerse por tres puntos diferentes, …” Agrega: “Así, casi simultáneamente y cuando los hombres se encontraban a pocas varas de distancia de la casa, todos los jefes y casi un tercio de la fuerza, quedaron muertos o heridos. Entonces los demás viendo que ya nada podía hacerse con lo que quedaba se retiraron llevándose sus heridos, y en pocos minutos iban en plena retirada hacia Tipitapa.” … “En la atrevida, pero inútil carga que dio sobre San Jacinto, pereció Byron Cole, cuya energía y perseverancia había contribuido tanto a la venida de los americanos a Nicaragua” … “Ni la pérdida de Cole fue la única de aquel día fatal, Marshall murió de sus heridas al llegar a Tipitapa; y entre los perdidos se notaba Carlos Callahan, nombrado Administrador de Aduana en Granada…” “La retirada de los voluntarios de San Jacinto fue irregular y desordenada, y la llegada de la columna derrotada tuvo un efecto desastroso en las tropas… El pánico fue tan grande, que destruyeron el puente para impedir que sirviese al enemigo que aguardaban a cada instante…” “Pocos días después de la acción de San Jacinto, llegaron a Granada unos doscientos hombres provenientes de Nueva York para el servicio de Nicaragua…”.
8.- El cabo Faustino Salmerón se encontraba de vigía al amanecer del 14 de septiembre, dio aviso de la presencia de tres columnas de filibusteros que se dirigían a la hacienda lo que permitió disponer la defensa para repeler el ataque. Fue uno de los soldados que, ante la huida de los mercenarios emprendieron la persecución. Dos días después, el 16 de septiembre, en la hacienda San Idelfonso, Salmerón ejecutó “al filo de machete” a Byron Cole, quien no solo era jefe de los filibusteros que atacaron San Jacinto, sino el dueño de la “Concesión de colonización” que endosó a su socio Walker para traer a los filibusteros; fue firmada en diciembre 1854 con Francisco Castellón, líder Democrático, para obtener apoyo en contra de los Legitimistas.
9.- Observemos desde el origen y evolución de los acontecimientos:
- Conforme la Constitución Política del Estado de Nicaragua del 12 noviembre de 1838, el 1ro. de abril de 1853, el legitimista Fruto Chamorro, de la aristocracia conservadora granadina, tomó posesión como nuevo Director del Estado según las elecciones poco transparentes en las que derrotó al democrático Francisco Castellón los que cuestionaron los resultados.
- Nicaragua se separó de la Federación de Centro-América el 30 de abril 1838 asumiendo que “El Estado de Nicaragua es libre, soberano e independiente”. Siete meses después promulgó la carta Magna; el artículo 1º. indica: “El Estado conservará esta denominación: Estado de Nicaragua, se compone de todos sus habitantes, y pertenecerá por medio de un pacto a la Federación de Centro-América”. Señala: “El Poder ejecutivo se ejercerá por un Supremo Director nombrado por el pueblo del Estado”. El artículo constitucional (1838) es similar al de la Constitución del Estado del 8 abril 1826 cuando Nicaragua era parte de la República Federal de Centro-América, fue promulgado al final de la Revolución Popular, Anti-oligarca y Antiimperialista liderada por Cleto Ordoñez (1826).
- Chamorro influyó en la Asamblea Constituyente para reformar la constitución de 1838. La Constitución fue sancionada sin legitimidad el 30 de abril de 1854. Dice: “La República de Nicaragua se compone de todos los nicaragüenses: es libre, soberana e independiente”, se refiere a República y no Estado, elimina el principio unionista, clausura el proyecto histórico liberal revolucionario de la patria centroamericana, establece la figura de Presidente por período de cuatro años, es conservadora, favorece a las clases privilegiadas.
- En mayo 1854 Máximo Jerez junto a 25 nicaragüenses desembarcó en El Realejo, avanzó a Chinandega y León, derrotó a Chamorro quien huyó a Granada. Así inició la Guerra Civil de 1854 entre legitimistas y democráticos. Jerez derrotó en Granada a las fuerzas de Fruto Chamorro quien depositó el gobierno en el legitimista José María Estrada. Chamorro fue el último Director del Estado de Nicaragua, no el primer Presidente de la República.
- Francisco Castellón instaló un gobierno provisional en León en junio 1854. Los democráticos controlaban occidente, los legitimistas estaban en Granada, Managua, Chontales y Matagalpa. Los bandos en conflicto recibían apoyo de otros Estados de Centro-América: Chamorro de Guatemala y Castellón de Honduras.
- En este escenario Castellón firmó la contrata con Byron Cole (28 diciembre 1854) para traer doscientos norteamericanos que prestarán sus servicios durante la guerra, llamó al contingente Falange Democrática.
- El 13 de junio de 1855 William Walker arribó a El Realejo con 58 hombres. Siete días después se le dio el cargo de coronel y la autorización de la expedición hacia al sur con tropas del Ejército Democrático, en el ataque a Rivas fueron derrotados por los legitimistas. El invasor tenía el propósito de apoderarse de la Compañía Accesoria del Tránsito para asegurar la ruta interoceánica.
- En esa primera batalla de Rivas el 29 junio 1855, cuando fueron enfrentados los filibusteros extranjeros junto a sus aliados nacionales, tuvo lugar la acción heroica de Enmanuel Mongalo.
- El 12 de marzo de 1855 falleció por enfermedad Fruto Chamorro, por lo que los legitimistas nombraron a José María Estrada como presidente interino y al Ponciano Corral al mando del ejército. El 8 de septiembre, falleció Francisco Castellón en León víctima del cólera. Los líderes de ambos partidos habían desaparecido del escenario político en el mismo año.
- El 13 de octubre de 1855 Walker se tomó Granada; se nombró Director Provisorio y General de Brigada; contó con apoyo del embajador de los Estados Unidos. Después instaló al liberal Patricio Rivas como Presidente Provisorio, desarticuló los grupos armados legitimistas y democráticos y quedó con el control total. Decidió fusilar a Ponciano Corral por “traición”.
- Los gobiernos de Centro América, desde fines de ese año, vieron con preocupación la presencia filibustera y desde principios de 1856 comenzaron a asumir la necesidad de defender la nación Centroamericana. El 26 de febrero de 1856 el presidente de Costa Rica Juan Rafael Mora, le declaró la guerra a Walker por considerarlo “enemigo de la Independencia de Costa Rica”. Mora se tomó Rivas, abandonó la ciudad por el cólera que diezmó su tropa.
- Percatándose de la grave amenaza para la independencia, el 23 de junio de 1856, el presidente títere Patricio Rivas, salió de Granada para León, en un acto de recapacitación patriótica, rompió la alianza con Walker y emitió un decreto declarando a “Guillermo Walker enemigo de Nicaragua”, anunció que deberían realizarse elecciones anulando las anteriores en las que fue “electo”. Llamó a los nicaragüenses para “ponerse en armas contra Walker… para defender la libertad, independencia y soberanía de la República”. La ruptura Walker ubica a los democráticos en contra del invasor y abre las puertas para la unidad.
- El invasor designó presidente provisional a Fermín Ferrer (20 junio – 12 julio 1856), otro títere legitimista, convocó a elecciones ilegales y el 12 de julio se nombró presidente, prestó juramento en la plaza de Granada con la presencia del Ministro norteamericano John Wheeler, quien reconoció al gobierno el 19 de julio.
- Frente a la grave amenaza, los dos partidos políticos, legitimistas (moderado) representados por Tomás Martínez y democráticos por Máximo Jerez, -estaba en León con Patricio Rivas-, en guerra desde mayo de 1954, firmaron el Acuerdo de paz el 12 de septiembre de 1856 con la presencia del Gral. Ramón Belloso de El Salvador y el Gral. Mariano Paredes de Guatemala, en representación de los centroamericanos. Los contingentes de El Salvador, Guatemala y Honduras, iniciaron operaciones conforme el acuerdo después de la Batalla de San Jacinto. El Ejército Aliado y el de Nicaragua se moralizaron por esos resultados; “cambió en el imaginario militar la correlación de fuerzas”.
- El Acuerdo del 12 de septiembre en León fue condición de los ejércitos Aliados de Centro-América para actuar en conjunto con Nicaragua en contra de los filibusteros; acepta como Presidente Provisorio a Patricio Rivas en el mando Supremo de la República quien deberá convocar a elecciones según la Constitución de 1838 ocho días después de expulsar a los filibusteros de Nicaragua; Tomás Martínez quedó a cargo del Ejército, habrá olvido general de lo pasado y de cualquier acto de hostilidad que se hubieran hecho los partidos; los generales de Guatemala y El Salvador fueron garantes.
10.- A partir del acuerdo político-militar del 12 de septiembre inició la Guerra Nacional, el conflicto asume nuevo carácter. Se prolongará hasta la capitulación y expulsión de Walker de Nicaragua el 5 de mayo de 1857. Es un pacto que implicó unidad nacional y centroamericana frente al invasor que amenazaba la independencia centroamericana. Por primera vez, desde el efímero proceso por constituir la República Federal de Centro-América con las Provincias Unidas de Centro-América el 1ro. de julio de 1823, Centro-América, desde Nicaragua, al borde del precipicio, fue capaz de asumir una decisión fundamental. Fue “Pacto providencial”, “Acuerdo de reconciliación”, el más importante de los pactos políticos centroamericanos (superior quizás a Esquipulas II a pesar de la amenaza norteamericana), implicó arriesgarlo todo para enfrentar el mal mayor: la pérdida de la soberanía y la independencia.
11.- Del 11 al 13 de octubre se concentraron los ejércitos de Centro-América en Masaya, incluido el batallón San Jacinto de José Dolores Estrada. Walker atacó la ciudad sin poder tomarla. Estaba rodeado en Granada por la ofensiva de los Aliados, decidió por lo que concentró sus fuerzas en Rivas. Entre el 23 y 24 de noviembre los filibusteros abandonaron la ciudad dejándola incendiada. En diciembre de 1856 Costa Rica se reincorporó a la Guerra Nacional incursionando por el Río San Juan y San Carlos, cortó la Ruta del Tránsito de Walker.
12.- La batalla que los Aliados iniciaron en Rivas el 11 de abril llevará a la capitulación del jefe filibustero el 1ro. de mayo, quien, con unos pocos hombres cansados, salieron de Rivas. Walker y sus oficiales se entregaron a Charles Davis, Capitán del barco USA, St. Marys, anclado en San Juan del Sur, embarcándose el 5 de mayo de 1857 con destino a Panamá. A su regreso a Estados Unidos fue recibido en Nuevo Orleans como héroe, continuó persistiendo en el propósito obsesivo de la invasión a Centroamérica hasta que, en uno de sus intentos, fue capturado, condenado y fusilado el 12 de septiembre de 1860 en Trujillo, Honduras.
13.- Aunque cronológicamente la Batalla de San Jacinto ocurre dos días después del acuerdo entre Martínez, Jerez y los generales de Guatemala y El Salvador, dice Aldo Díaz Lacayo y otros, que no fue parte de la Guerra Nacional; las tropas legitimistas instaladas en la hacienda, aunque eran conscientes de la amenaza filibustera que trajeron sus enemigos democráticos, actuaban todavía por su cuenta, con visión partidaria. Martínez, que representaba el sector moderado conservador, fue a asumir el acuerdo apelando a su autoridad y prestigio, aun percibiendo que no contaba con el consenso de sus partidarios. Por otro lado, José Dolores Estrada, parte del sector conservador extremista, estando en San Jacinto, actuaba desde esa visión, que, por fortuna, en ese momento, también era patriótica. Este acontecimiento puede identificarse como preámbulo de esa etapa histórica que inicia con el acuerdo de unidad nacional-centroamericana para expulsar al invasor. Estrada, al enterarse del pacto asumido por Martínez, “lo repudió visceralmente”, “por razones político-ideológicas”, incluso desde la investidura de héroe a la que lo elevó el resultado de la batalla. “Querían desde el poder político total liquidar para siempre a los democráticos”.
14.-El devenir de los acontecimientos obliga a un parangón ineludible:
Los demócratas se alzaron en mayo 1854, recibieron apoyo de filibusteros (mercenarios, no Ejército regular de EEUU, aunque con la complicidad expansionista) desde 1855 en contra de los legitimistas, hasta que, por acuerdo del 12 de septiembre, el conflicto pasó de Guerra Civil a Guerra Nacional/Guerra de Liberación Nacional.
En 1927, setenta (70) años después, bajo ocupación militar norteamericana (ejército regular de EEUU), los liberales demandaron, en contra de los conservadores –intervención aceptada por ambos-, el restablecimiento constitucional usurpado mediante golpe de estado conservador, desencadenando la guerra civil, hasta la traición en el pacto Moncada-Stimson el 4 mayo 1927: de Guerra Constitucionalista/Guerra Civil pasó, a Guerra Antiimperialista/De Liberación Nacional que lideró Sandino.
15.- La Guerra Nacional de Centro América (12.09.1856 – 05.05.1857) y la Guerra Antiimperialista de Sandino (04.05.1927 – 02.02.1932), por su impacto y naturaleza antiintervencionista, el propósito nacionalista, independentista y de restablecimiento de la soberanía, constituyen dos procesos político-militares esenciales en la construcción de la identidad y la nación nicaragüense y centroamericana, y la de Sandino, también indo hispano, crean conciencia de nacionalidad.
16.- Hay una identidad diferenciada entre la Batalla de San Jacinto, un hecho concreto con importantes consecuencias en sí misma, y la Guerra Nacional, un proceso de 237 días (12 septiembre 1856 – 5 mayo 1857) en el que se produjeron acciones militares de mayor envergadura en Masaya, Granada, Rivas, Río San Juan y otros. La importancia de la Batalla de San Jacinto radica, no en la magnitud bélica de lo ocurrido, que algunos califican de escaramuza, sino en “las consecuencias subjetivas”.
17.- Walker reconoció: “tuvo un efecto desastroso en las tropas”; percibieron el incremento de la resistencia contra la superioridad filibustera. El suceso no hubiera tenido impacto contundente, ni se hubiera difundido la noticia con rapidez si, entre los muertos, no estuviera Cole, el norteamericano que firmó la Contrata para traer a los invasores. Según Luis Alberto Cabrales: “el valor de San Jacinto es psicológico: la derrota de un pequeño contingente filibustero no hubiera pasado a más si el saldo de bajas no hubiera incluido la muerte de Byron Cole de inmenso valor simbólico para ambas partes. Una baja que produjo automáticamente el entusiasmo y el envalentonamiento del ejército Aliado (…) Entonces, aun considerando su radical militancia legitimista hasta su muerte, José Dolores Estrada es Héroe Nacional a pesar de él mismo”. Entre la resistencia nacional que comenzaba a integrarse para vencer y expulsar al invasor, sintieron que podían lograrlo: el enemigo no era invencible; ello permitió incrementar su capacidad ofensiva.
18.-Dado que el 13 de agosto 1856, José María Estrada, presidente provisional a la muerte de Fruto Chamorro fue asesinado en Ocotal, José Dolores Estrada consideraba descabezado el gobierno legitimista, no reconocía a Patricio Rivas según el acuerdo del 12 de septiembre, por lo que el parte de guerra del 14 no va dirigido con nombre a nadie, aunque lo recibe Fernando Chamorro en Matagalpa. Menciona: “Sr. Ministro de la Guerra del Gobierno Constitucional. Del General en Jefe del Ejército Libertador de la República”. La defensa de San Jacinto tuvo un carácter partidario.
19.-La omisión de los indios flecheros es la manifestación de la exclusión formal que muestra la manera en que ha sido contada la historia. Otro olvido es el cabo Faustino Salmerón. Los testimonios afirman que en la madrugada del 14 divisó la llegada de los filibusteros, y fue uno de los enviados en persecución de los atacantes que huían y alcanzó en la hacienda San Idelfonso a Byron Cole para ejecutarlo.
20.- Según lo ocurrido la ejecución de Cole “es el principio del fin de la invasión filibustera en Nicaragua”, es equivalente, -con la diferencia correspondiente-, al “principio del fin de la Dictadura” cuando Rigoberto López Pérez se inmoló el 21 de septiembre de 1956, exactamente un siglo después, poniendo fin al fundador de la Dinastía Somocista (7 días antes -14.09.1956-), había conmemorado de manera ostentosa, con invitados de Centro América, desde la visión conservadora bipartidista, el Primer Centenario de la Guerra Nacional en la Hacienda San Jacinto ; Fue el asesino a traición de Sandino y el último marine que dejó en Nicaragua la ocupación americana que enfrentó en la Guerra Antiimperialista-De Liberación Nacional (1927-1933) el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional.