Peligroso juego de política exterior de Rubio quiere manchar las manos de sangre de Trump
“Él [Marco Rubio] le quiere manchar las manos de sangre a Donald Trump. Él es un hombre inteligente, audaz. Él sabrá qué hace, ojalá que esos canales que tenemos se recuperaran, si fuese así, siempre bienvenidos, con la palabra, el respeto; todo es posible”, expresó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.
Durante una rueda de prensa internacional, el jefe de Estado refirió a su homólogo estadounidense que se debe cuidar, dado que, Marco Rubio quiere manchar sus manos [las de Trump] de sangre suramericana y caribeña.
Asimismo, destacó que ante las amenazas y represión, el pueblo venezolano es campeón mundial antiimperialista y anticolonialista históricamente. “Somos los rebeldes históricos de este continente y hemos hecho valer y haremos vales nuestra rebeldía milenaria”, recalcó.
En este sentido, hizo hincapié que a los venezolanos se les respeta debido a que son caracterizados por ser personas de dignidad, conciencia y valores. Además, afirmó que Venezuela está abierta a la diplomacia de paz y al diálogo entre las partes, así como de promover la paz entre los pueblos.
Maduro afirma que Venezuela enfrenta la más grande amenaza del continente en 100 años
Nicolás Maduro advirtió, durante una rueda de prensa en Caracas, que Venezuela se encuentra frente a “la más grande amenaza que se haya visto en nuestro continente en los últimos 100 años”.
El dirigente afirmó que 8 barcos militares, con 1.200 misiles y un submarino nuclear se encuentran desplegados cerca de las costas venezolanas.
“Es una amenaza extravagante, injustificable, inmoral, absolutamente criminal y sangrienta”, dijo Maduro.
Agregó que la administración de Estados Unidos optó por aplicar una política de “máxima presión” militar contra Venezuela
“Nosotros hemos declarado la máxima preparación para la defensa de Venezuela, activando siempre la Constitución. Venezuela es un país pacifista, pero somos un pueblo de guerreros”, expresó.
Maduro comparó la situación con la crisis de octubre de 1962 contra Cuba y aseguró que “jamás cederá ante chantajes o amenazas” de ningún tipo.
“Optaron por el peor error, la presión militar”, insistió.
Estados Unidos “está listo y preparado para invadir” Venezuela
El gobierno de Maduro informó ante la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños que 4.200 militares estadounidenses estarían listos y preparados «para invadir” su territorio.
El canciller Yván Gil instó a los países de la región a exigir el retiro inmediato de estas fuerzas y de las embarcaciones desplegadas.
Detalló que la flota estadounidense violaría no solo la declaración de América Latina como zona de paz, sino también el Tratado de Tlatelolco de 1967, que prohíbe armas nucleares en la región.
El canciller señaló que Washington utiliza como pretexto el Cartel de los Soles, al que vincula con el gobierno chavista, y advirtió que cualquier conflicto bélico sobre este argumento desestabilizaría toda la región.
Según dijo, solo 5% de la cocaína que se produce en Colombia intenta pasar por Venezuela, y de ese porcentaje 70% es incautado por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y los cuerpos policiales.
“Pedimos a toda la comunidad latinoamericana y caribeña dar un paso al frente en defensa de la zona de paz y a condenar y exigir el retiro inmediato de estos activos militares”, concluyó Gil.
Celac se pronuncia contra avanzada militar de EE. UU. en mar Caribe
Colombia, que ostenta la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), lideró una reunión virtual extraordinaria de cancilleres en defensa de la Zona de Paz en América Latina y el Caribe, dada la preocupación por la presencia de buques militares de Estados Unidos en el mar Caribe.
La ministra colombiana de Relaciones Exteriores, Yolanda Villavicencio, explicó que este encuentro con 23 países logró unificar la voz regional en favor de la convivencia pacífica y el compromiso con la Proclama de América Latina y el Caribe como una Zona de Paz, rechazando la amenaza de injerencia de cualquier nación extranjera.
«Eso nos llama la atención para pronunciarnos respecto a la necesidad de mantener a América Latina como una tierra de paz, fuera de cualquier intervención y en estricto respeto a las declaraciones de Naciones Unidas y al mantenimiento de la paz y de la soberanía de los países», señaló.
La alta funcionaria agregó que toda acción en la región se debe ajustar a los principios del Derecho Internacional, el respeto de la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados.
Asimismo, evocó las directrices del presidente colombiano, Gustavo Petro, quien señaló que «ningún Gobierno latinoamericano que se respete debe solicitar ni celebrar una invasión extranjera».
La ministra reiteró que los países de la Celac que acudieron a la reunión de emergencia coincidieron en afirmar que cualquier acción armada sin autorización de los Estados involucrados constituye una agresión en contra de toda la región.
«Estas no son frases de coyuntura. Son una defensa explícita de la no intervención y del continuo fortalecimiento del multilateralismo», advirtió.
Por su parte, el canciller venezolano, Yvan Gil, agradeció a Colombia por convocar la reunión y aseguró que Estados Unidos está violando la Zona de Paz y el Tratado de Tlatelolco, al desplegar ocho barcos con más de 1.200 misiles y amenazar con armas nucleares al Caribe venezolano.
«4.200 tropas entrenadas que han anunciado que están listas y preparadas para invadir el suelo sagrado de nuestra patria, la República Bolivariana de Venezuela, pero más grave aún (…) la presencia de un submarino nuclear con posibilidades de lanzamiento de armas nucleares», sostuvo Gil.
De otro lado, Petro escribió en X que, si hay una agresión violenta contra Venezuela, todos los Estados de la región se debilitarán.
«En la patria grande de Bolívar no puede haber sino soberanía nacional. Ni en Panamá, ni en Ecuador ni en Colombia ni en Venezuela deben haber sujeciones serviles a extranjeros», afirmó.
Petro reconoció la necesidad de cooperar con países del mundo en la lucha contra el narcotráfico «pues se trata de un problema de la humanidad, pero en términos de igualdad, no de sumisión».
De acuerdo con el presidente de EE. UU., Donald Trump, la avanzada militar en aguas del Caribe venezolano obedece a una operación antinarcóticos reforzada en contra de los carteles que operan en América Latina.