A Venezuela le favorece menos producción OPEP

Compartir:

A Venezuela le favorece menos producción OPEP

Werher Sandoval 

El haber reiterado la importancia crítica de adherirse al pleno cumplimiento del mecanismo de conformidad y de compensación, en la 39.ª Reunión Ministerial de la Opep y de países no Opep realizada el pasado 28 de mayo, revela la preocupación y esfuerzo de la Organización por evitar alteraciones en los precios del crudo, causadas por el incumplimiento de cuotas y la guerra arancelaria de Trump.

La organización nacida en 1960 adoptó en 1982 el sistema de cuotas para enfrentar la sobreproducción petrolera y la caída de precios, un escenario que, con matices y sus respectivas distancias contextuales, es similar al actual.

Por causa de las sanciones, tanto Irán como Venezuela están excluidos del mecanismo de asignación de cuotas de producción. Libia también está exenta por causa de las actuales guerras intestinas ocasionadas por el asesinato de Mohammed Gadafi por parte de la Otan. Nigeria por inseguridad y robos de infraestructuras petroleras.

En ocasiones, algunos miembros de la Opep no respetan las cuotas asignadas en las reuniones del organismo, conductas que provocan el incumplimiento del objetivo estatutario de alcanzar precios equilibrados, justos y estables del barril de crudo.

A la violación de las cuotas se añade que el mercado petrolero se ha visto afectado por la guerra económica declarada por Trump, una de cuyas armas es usar los aranceles para encarecer los bienes y servicios importados por EEUU, lo cual implica una menor actividad comercial que se traduce en la baja del barril por causa del menor consumo de la energía extraída del petróleo.

Con mayores aranceles y encarecimiento de los bienes y servicios importados por EEUU, Trump busca que las empresas estadounidenses mudadas al extranjero, así como las de otros países, se instalen en la nación del norte para hacer a “EEUU grande otra vez”, tal como proclama el mandatario.

Pero la desbocada y zigzagueante aplicación de aranceles y su consecuente menor consumo energético y de petróleo ha llevado los precios del crudo a niveles críticos que afectan a las mismas empresas petroleras estadounidenses, las cuales han puesto en marcha lobys para que Trump reduzca la intensidad arancelaria, sobre todo contra naciones claves, como China.

Es así como la presión de los lobys y los efectos inflacionarios de los productos importados influyeron para que Trump volviese, una vez más, a echar para atrás su decisión. La agencia Bloomberg destacó que “el tono del imprevisible multimillonario republicano cambió radicalmente respecto a sus furibundos comentarios de la semana pasada, cuando acusó a Pekín de no respetar el acuerdo de tregua comercial negociado en mayo”.

El efecto sobre el mercado del petróleo fue que, apenas el presidente de China, Xi Jinping, instó al mandatario estadounidense a “corregir el rumbo de las relaciones bilaterales” y manifestara estar “abierto a que Trump visite la gran nación asiática”, el precio del marcador West Texas Intermediate subió, el viernes 6 de mayo, 2,15% hasta 64,72 dólares.

En esa línea, OilPrice.com informa que los precios del petróleo subieron a pesar de las expectativas de que la Opep+ continuará impulsando la producción en los próximos meses.
Añade que los analistas de materias primas de Morgan Stanley esperan que la Opep+ realice tres nuevos aumentos mensuales a su producción, devolviendo los 2,2 millones de barriles diarios que acordó retirar del mercado en 2022, para octubre.

“Un aumento de la cuota probablemente generará margen para un aumento de la producción en Arabia Saudita y, en cierta medida, en Kuwait y Argelia. Sin embargo, no prevemos que el aumento de la cuota se traduzca en aumentos de producción proporcionales para el resto del ‘Grupo de los Ocho’”, escribieron también los analistas.
La última data disponible, 2022, informa que el costo de producción de un barril de petróleo en Venezuela se ubicó entre 11 y 15 dólares, casi el doble del marcado en 2016, alrededor de cuatro veces el promedio de 2002 y quince veces más que el realizado en la década de los años 60, según el Ministerio de Petróleo y Pdvsa.

En la actualidad, producir el barril venezolano podría superar los 35 dólares al incluirse el enorme peso de las ilegales y unilaterales sanciones, que afectan desde los planes de mantenimiento y hasta generan fugas de producción, a lo cual se añaden los costos de mejoramiento y transporte. A esto hay que añadir que el bloqueo coacciona su venta con descuentos.

Es decir, en la actual coyuntura, un aumento de producción de la Opep favorece a Arabia Saudita y podría afectar los ingresos de Venezuela. En lo que va de año, el precio promedio del barril venezolano se ubica en 56,3 dólares y el Brent en 71,05. La cesta nacional cerró el lunes pasado en 49,25.

En otras palabras, un alza en la oferta petrolera impulsada por una mayor producción beneficia, mayormente, a Arabia Saudita por gozar de un mayor margen entre el costo de producción de su barril, entre 3 y 9 dólares, y el precio de su cotización en el mercado.
Total, mientras que en Venezuela, dependiendo del campo, producir un barril varía entre 20 y 40 dólares, en Arabia Saudita va de 3 a 9 dólares y en Colombia de 13 a 15 dólares.

Últimas Noticias


 

Más notas sobre el tema