México: informe oficial admite que el Tren Maya pone en riesgo a poblaciones indígenas y al ambiente

1.421

Conacyt ocultó informe crítico con el Tren Maya; ven riesgo

El Tren Maya, la obra estrella de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, conllevará afectaciones negativas a 10 Áreas Naturales Protegidas (ANP) y a sus servicios ambientales, como la recarga de los acuíferos y su capacidad para capturar carbono. Además, podría implicar la destrucción irrecuperable de mil 288 sitios arqueológicos, ha vulnerado los derechos de 146 mil indígenas, las tierras aportadas para el proyecto y sus polos de desarrollo jamás podrán recuperarse; además, el empleo que creará será precario y temporal.

También se prevé que abone al incremento de la trata de personas y al tráfico de drogas en los cinco estados afectados.

Ese es el resumen del documento Territorios mayas en el paso del tren: situación actual y riesgos previsibles, elaborado por el grupo constituido por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) para el análisis de riesgos en los territorios en los que está proyectado el Tren Maya.

A finales de septiembre de 2019, el Conacyt invitó a más de 30 investigadores para conformar este grupo con el fin de estudiar las afectaciones a lo largo de los mil 500 kilómetros de vía, las diferentes estaciones y ciudades por las que pasará el tren.

Tras la convocatoria de la consulta, el 15 de noviembre de 2019, el consejo apremió a los investigadores para que entregaran el análisis, bajo el entendido de que la información se difundiría antes del proceso.

De acuerdo con fuentes cercanas a su elaboración, un primer resultado fue enviado entre el 10 y el 12 de diciembre, pero el informe, en lugar de ser distribuido a secretarías y público en general, fue detenido.

El análisis completo consta de cinco documentos de 60 cuartillas cada uno y se hizo llegar un resumen ejecutivo a la Presidencia de la República. La consulta se celebró finalmente el 14 y el 15 de diciembre de 2019. Votaron 100 mil personas en Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán.

La División de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dijo que ésta no cumplió con los estándares internacionales y que los votantes apoyaron la obra sólo por la posibilidad de cubrir sus necesidades básicas.

“Nos pusieron tiempos muy breves para cumplir con esa fecha, pidiéndonos que entregáramos algo. Y lo hicimos. Pero ahí se paró. Nos dijeron que era muy tarde y que ahora no querían sacarlo antes de la consulta para no influir”, explicó uno de los investigadores bajo condición de anonimato. En el propio documento falta información pública sobre el proyecto, la cual salió a la luz tras la consulta.

El Conacyt dijo después que lo difundiría en otras dos ocasiones (el 17 de diciembre de 2019 y, luego, en la tercera semana de enero de 2020); sin embargo, nunca lo hizo.

El informe, según se lee, pretende ofrecer “información a los diversos actores de la sociedad, del gobierno y de la academia que tienen interés o la responsabilidad de contribuir activamente a garantizar la prevalencia del bien público”; aunque aclara que no se dispone “todavía de estudios de infraestructura básica, impacto social, impacto ambiental y otros más específicos indispensables para estimar la viabilidad y pertinencia de un proyecto de esta envergadura”.

El Tren Maya está en la zona de influencia de “yacimientos petroleros del país y con una buena parte de los mineros”.

EL UNIVERSAL solicitó la postura del Conacyt; sin embargo, al cierre de esta edición no se obtuvo respuesta.

Medio ambiente

El proyecto del Tren Maya afectará a por lo menos 10 Áreas Naturales Protegidas: reservas estatales de Balam Kin y Balam Kú (Campeche); el Parque Nacional de Palenque (Chiapas); las Áreas de Protección Cañón del Usumacinta (Chiapas), Yum Balam, Manglares de Nichupté y Uaymil (Quintana Roo); las Reservas de la Biosfera de Sian Ka’an (Quintana Roo), así como Los Petenes y Calakmul (Campeche).

“Sufrirán alteraciones [degradación, fragmentación y deforestación] asociadas con la construcción, circulación y desarrollo del proyecto”, el cual tendrá un impacto negativo en los servicios ambientales de los ecosistemas que serán afectados, destacando la recarga del manto freático y la captura del bióxido de carbono atmosférico.
Arqueología

Mil 288 sitios arqueológicos registrados en el inventario del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) están en un margen de 10 kilómetros a ambos lados de la vía prevista: “Tendrían una afectación directa que, atendiendo a los cálculos de pasajeros y carga del tren, podrían implicar la destrucción irrecuperable de vestigios culturales, daño físico, adulteración o uso turístico excesivo”, se lee en el documento.

Pueblos indígenas

El Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) registra, en una franja de un kilómetro a cada lado de la vía, 197 localidades indígenas con 143 mil personas de pueblos originarios “que serán afectadas por la construcción y funcionamiento del tren”. El informe cita el Convenio 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) firmado por México y asegura que el derecho a contar con su “consentimiento libre, previo e informado” no se cumple en el caso del Tren Maya, ya que “no se ha hecho público el proyecto correspondiente ni los estudios de ingeniería básica e impactos ambiental, cultural y social” e incluso, “el trazo ha sido modificado y rectificado sin asegurar cuál es el definitivo que se propone”.
Tierras para el Tren Maya

Para que ejidatarios y pequeños propietarios aporten tierras para el Tren Maya, las estaciones y sus ciudades, se propone el esquema FIBRA, un fideicomiso que cotizará en la bolsa, en el que las comunidades pondrían las tierras y los inversores, el dinero.

“Mediante las FIBRAS, la tierra no cambia de propietario, pero es entregada como soporte material y financiero”, dice el documento. Estos instrumentos financieros híbridos tienen mayoritariamente rentas variables, cuyo rendimiento no está garantizado, podría incluso ser nulo, y la inversión se podría perder. Además, “la tierra ya no podrá ser recuperada, a menos que los propietarios tuvieran el capital suficiente para comprar la totalidad de los certificados bursátiles o los inmuebles construidos encima”.

Empleo

El documento explica que la promesa de nuevos empleos es un elemento central del Tren Maya, pero observan dos problemas principales: por un lado, obedece principalmente a los trabajos de construcción que tienen una duración limitada y después de un primer momento de alta incorporación, vendrá una baja. Además, se orientará a empleos precarios, con baja remuneración y sin prestaciones que supone un trabajo de base.
Turismo

El Tren Maya, con su orientación al turismo, tendrá “un impacto en el aumento de actividades ilícitas como la trata de personas y la circulación y uso de drogas”, lo que lleva al descuido e irrespeto con el entorno, que pone en riesgo el patrimonio cultural”.

El Universal


El fondo de inversiones BlackRock está interesado en el Tren Maya, dice AMLO

BlackRock, considerada la mayor empresa de gestión de activos del mundo, está interesada en invertir en el Tren Maya, una obra insignia del plan de infraestructura del gobierno, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia matutina de este lunes.

La semana pasada, López Obrador, conocido como AMLO, se reunió en México con Larry Fink, presidente de BlackRock. Entonces, el mandatario dijo que el ejecutivo le expresó su confianza en México y agradeció su decisión de invertir en el país.

«Nos va a apoyar porque se está viendo a México como un país para la inversión. Ellos (BlackRock) está invirtiendo en Pemex y tienen también interés en invertir en el Tren Maya, en algún tramo», dijo AMLO.

La obra, de unos 6,300 millones de dólares, será construida sobre parte de una vía ya existente y recorrerá unos 1,500 kilómetros desde la zona arqueológica de Palenque, en Chiapas, hasta la turística Cancún, en la Península de Yucatán.

Consulta

López Obrador también dijo que una consulta pública sobre la construcción de una planta de la gigante cervecera Constellation Brands, en el norte del país, se llevará a cabo el 21 y 22 de marzo.

La nueva fábrica que la empresa levanta en Baja California, cerca de la frontera con Estados Unidos, ha sido criticada por el mandatario, argumentando que debió haber sido construida en otro lugar con mayor disponibilidad de agua.

«Es vinculante porque (la Secretaría de) Gobernación tiene facultades para este propósito. No se le llama realmente consulta, se le llama ejercicio participativo», señaló.

Constellation, que importa la cerveza Corona y el resto de marcas del Grupo Modelo a Estados Unidos, ha dicho que su planta no «afectará, en ningún momento, la disponibilidad y el abastecimiento de agua en la región».

Tras varios retrasos, la fábrica, cuya inversión ronda los 1,400 millones de dólares, estaría lista a fines de 2021. La firma tiene otras plantas también en el norte del país.

Expansión


El Tren Maya retomará su trazo original por la presencia de cenotes

Por Juan Tolentino Morales

El cuarto de los siete tramos que constituirán el Tren Maya, que irá de Izamal a Cancún, tendrá una modificación para evitar la cenotes y vestigios arqueológicos, lo que le llevará al proyecto a seguir su trazo original, informó en conferencia de prensa Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur).

El tramo buscaba conectar desde Valladolid, en Mérida, a Tulum, en Quintana Roo, con una distancia de 193 kilómetros en la que existen 320 hectáreas de áreas vulnerables, por lo que se optará por hacer adecuaciones en la carretera Kantunil-Cancún, actualmente concesionada a la firma ICA, y el tramo continuará hacia Cancún para luego bajar a Tulum.

Parte de la modificación implicará utilizar el lado sur de la carretera para la cimentación del tren, mientras que el lado norte se haría una vía vehicular de dos sentidos. Debido a que la vía está aún bajo resguardo de ICA, Fonatur señaló que se dará algún tipo de resarcimiento, aunque no especificó si será una ampliación de la concesión u otro tipo de beneficio.

Esto llevará a un breve retraso de la licitación del tramo 4 de 15 días, y prevé comenzar su construcción el 25 de mayo, que podría elevar el costo de las obras, aunque Jiménez Pons indicó que sería cubierto con otros ahorros que se han realizado.

El director del Fonatur descartó la modificación de otros tramos, salvo el llamado Tramo 1 Caribe, que va de Escárcega a Chetumal, que iniciará su construcción en 2021, y donde también se prevé la presencia de áreas vulnerables.

Interés de iniciativa privada se mantiene

Respecto al financiamiento del proyecto, Jiménez Pons dijo que el proyecto mantiene la intención de tener un financiamiento totalmente público, mientras que las estaciones y otras infraestructuras tendrán un 94% de recursos provenientes del sector privado.

La falta de participación de las empresas en el proyecto per se no es debido a falta de interés, dijo, ya que instituciones como Goldman Sachs, BlackRock, Merrill Lynch, Banorte y BBVA mostraron su interés para financiar la obra cuando se contemplaba bajo un esquema de asociación público-privada, y debido a que el gobierno no quiere asumir deuda, se optó por utilizar recursos públicos.

“No queríamos dejar deuda soberana más los intereses. Una asociación público-privada a 30 años tenía el riesgo de que subiese en dólares, ya que el tipo de composición obligaba a hacer una parte en pesos y otra en dólares. Hay ahorros, y con esto se busca financiar el 100%”, dijo.

Además, el fondo de inversiones BlackRock presentó una propuesta no solicitada a la Secretaría de Hacienda para la carretera Cancún-Tulum que consistiría en la ampliación de la vía, lo cual representaría un ahorro para el Fonatur ya que contemplaría la construcción de 26 pasos peatonales.

Expansión


VOLVER
Más notas sobre el tema