Venezuela hizo oír su voz en la III Cumbre UE-CELAC

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Venezuela hizo oír su voz en la III Cumbre UE-CELAC

La III Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se celebró durante los días 17 y 18 de julio, por primera vez desde hacía ocho años. Más de 50 gobernantes de América Latina, el Caribe y Europa se reunieron en Bruselas, capital belga, para participar en este foro.

La vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez acudió en representación de Venezuela. Con su presencia dejó en claro que los intentos por aislar internacionalmente al único y legítimo Estado venezolano fueron un efímero episodio que no se concretó.

Las primeras imágenes

La vicepresidenta venezolana fue recibida en la sede donde se realizaba la Cumbre por el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez —quien tiene la presidencia pro témpore del bloque europeo—, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y Charles Michel, titular del Consejo Europeo.

La prensa europea criticó con saña el efusivo saludo del presidente español a la alta funcionaria venezolana. Una imagen que marca una gran diferencia respecto a las acciones de la Unión Europea enmarcadas en la estrategia de «máxima presión» contra nuestro país. Recordemos que muchos gobiernos del bloque europeo apoyaron el «proyecto Guaidó», de factoría estadounidense, y reconocieron al exdiputado de Voluntad Popular como «presidente encargado» de Venezuela, incluido el mismo Sánchez, en 2019.

Pedro Sánchez, presidente del gobierno español; Jacques Michel, presidente del Consejo Europeo; y Ursula Von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, recibieron a la vicepresidenta Delcy Rodríguez en la cumbre UE-CELAC (Foto: Vicepresidencia de Venezuela)

En declaraciones previas al desarrollo de la reunión, la alta funcionaria venezolana fijó la posición y objetivos de su país en la III Cumbre UE-Celac. Reiteró el compromiso del gobierno venezolano con la denuncia de levantar las medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela.

«Venimos con mucha esperanza para traer el mensaje de Venezuela, el levantamiento del bloqueo criminal contra nuestro país, un mensaje de paz, de armonía, de cooperación, que debe ser la ruta que sigue y que guía a nuestro país», dijo.

Señaló que el mensaje de parte de la República Bolivariana hacia Europa es demostrarles a sus gobiernos que se puede entablar relaciones en las que prevalezcan el respeto y la cooperación.

La UE debe desistir de las políticas coercitivas

En su intervención ante la Cumbre, la Vicepresidenta destacó la importancia de tener una agenda común para desarrollar caminos de cooperación en un mundo que enfrenta grandes desafíos.

También hizo hincapié en la situación de Venezuela, Cuba y Nicaragua, países que han sido víctimas de bloqueos ilegítimos por parte de Estados Unidos, y otros países, y de campañas de criminalización a lo largo del espectro político-mediático dominante en Occidente.

En el caso de Venezuela, la agresión económica ha afectado tanto al país como a empresas europeas y caribeñas que tenían proyectos de negocios en conjunto. Nombró el ejemplo de Petrocaribe, un mecanismo creado durante el gobierno del presidente Hugo Chávez que contemplaba ayudas energéticas, financieras y económicas a los países caribeños, que después del llamado Decreto Obama (2015) y las medidas coercitivas estadounidenses que le sucedieron cayó a cero.

El impacto de esto último sobre naciones como Haití, que tenía una relación comercial histórica con Venezuela y hoy enfrenta una situación de gravedad e inestabilidad política, económica y social alarmante, es un testimonio de las consecuencias expansivas del bloqueo.

También hizo un llamado a respetar las leyes internacionales como única forma de protección ante las grandes potencias hegemónicas beligerantes, algo que ha reiterado en distintas tribunas y foros.

En la misma estela, la vicepresidenta señaló el carácter ilegal del bloqueo y las «sanciones» unilaterales argumentando que constituyen una violación directa a la Carta de las Naciones Unidas y al pacto internacional de derechos civiles y políticos.

Además, afirmó que el bloqueo ha generado una migración precarizada en América Latina y el Caribe, con las remesas como una de las principales fuentes de flujo externo.

Rodríguez destacó la importancia de trabajar en conjunto para enfrentar la crisis climática, que es un problema global que afecta a todos los países sin excepción. Asimismo mencionó que el asedio y la asfixia estadounidense ha afectado proyectos para mitigar los efectos de la crisis climática en Venezuela.

En este sentido ha propuesto establecer instancias de comunicación y coordinación permanente entre la UE y la Celac para superar las diferencias y enfrentar las amenazas más graves que ha vivido la humanidad.

Luego, la Vicepresidenta anunció el lanzamiento de un proyecto para aumentar la producción de gas en el estado Monagas. PDVSA y empresas energéticas europeas trabajarán juntas en esta concepción, iniciativa que muestra el giro que está ocurriendo en la forma como los países de la UE se relacionan con Venezuela, ya que antes respaldaban el «gobierno Guaidó» por mandato estadounidense.

Ahora, en medio de una crisis energética provocada por la desmesura occidental contra Rusia, estos Estados buscan obtener por la vía política y diplomática lo que no pudieron a través de acciones ilegales ante el derecho internacional.

Encuentro en la cumbre de los pueblos

La vicepresidenta Rodríguez también participó en la Cumbre de los Pueblos, donde se discutió el desafío que representan las medidas coercitivas unilaterales para todos los países.

Durante su intervención destacó la capacidad de resistencia de América Latina ante las agresiones multiformes y el fascismo. Asimismo, denunció las más de 900 «sanciones» que han repercutido sobre el Estado venezolano y han mermado sus ingresos.

Hizo mención del intento de magnicidio contra el presidente Nicolás Maduro en 2018 y las incursiones mercenarias (Operación Gedeón en 2020) que intentaron apropiarse por la fuerza del poder en Venezuela.

Aunado  a esto, señaló que el «hegemón imperial» ha intentado imponer un modelo que solo ha creado profundas desigualdades en una región que constituye actualmente la más desigual del mundo.

No dejó pasar la oportunidad para recordar el plan del expresidente estadounidense Donald Trump para apoderarse de las riquezas petroleras autóctonas. Explicó que la intención vino acompañada de bloqueos y «sanciones» económicas, así como de la promoción de un pretendido «gobierno paralelo» encabezado por el exdiputado opositor Juan Guaidó.

La Vicepresidenta afirmó que el objetivo del gobierno de Donald Trump consistía en robar al pueblo venezolano sus activos y dinero en bancos extranjeros, congelar sus propiedades en el exterior y crear una figura a fin de legitimar dichas acciones.

También hizo referencia a la deuda histórica que Estados Unidos tiene con el Caribe por el genocidio de más de 70 millones de esclavos que llegaron desde África hasta América. Afirmó que ese país debe reparación moral, ética y económica a los pueblos del Caribe.

Rodríguez reivindicó el espacio de la cumbre con la UE para hablar entre pares con el derecho de igualdad, como lo defiende la Carta de las Naciones Unidas.

«Estamos aquí con la alegría de siempre que tiene el venezolano de defender su libertad y a nuestro padre Bolívar y a Hugo Chávez», apuntó.

Diálogo sí, injerencia no

La cumbre UE-Celac sirvió como espacio para un nuevo encuentro de diálogo político sobre Venezuela. La vicepresidenta Delcy Rodríguez se reunió en Bruselas con líderes políticos de América Latina y Europa, con la participación de Gerardo Blyde como representante de un sector de la oposición.

La mesa de diálogo político sobre Venezuela, en el marco de la III Cumbre UE-CELAC, concluyó con un llamado urgente a «levantar las sanciones económicas que afectan al pueblo venezolano» (Foto: Cancillería de Argentina)

La reunión contó con la presencia de los presidentes de Colombia, Argentina y Brasil, así como del presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell.

Entre los temas que se discutieron estuvo el del levantamiento de las «sanciones» y la concreción de una hoja de ruta para las elecciones de 2024.

El presidente argentino Alberto Fernández destacó la importancia de respetar la soberanía venezolana y promover el diálogo entre oposición y gobierno. Por su parte, el presidente colombiano Gustavo Petro señaló que la intención de ese encuentro es volver a aclimatar el proceso del diálogo para llegar a un acuerdo democrático.

El momento fue considerado como una «buena iniciativa» por parte de Borrell. El diplomático europeo expresó a los medios, desde Bruselas, que era importante aproximar posiciones entre el gobierno y la oposición en aras de lograr unas elecciones aceptables para la comunidad internacional y los venezolanos.

Habló sobre la importancia de que Venezuela no pierda la oportunidad de celebrar estos comicios, pero reconoció que hay obstáculos a superar, como el levantamiento progresivo de las «sanciones» por parte de Estados Unidos.

Esta mesa de diálogo político con intervención europea tuvo lugar en medio de las críticas del presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, en relación con el posible despliegue de una misión de observación electoral de la UE en los comicios presidenciales de 2024. Las declaraciones surgieron después de que la UE, de manera impositiva, cuestionara la inhabilitación de María Corina Machado, quien no se esfuerza en ocultar que defiende los intereses extranjeros en detrimento de los de su propio país, lo que conlleva una penalización de acuerdo con las leyes nacionales.

Venezuela exige a Abdo Benítez pagar la deuda de Paraguay

La alta representante venezolana contestó a los actores políticos que intentaron minar la participación de Venezuela en la Cumbre. En particular no se contuvo al responder a los ataques del presidente paraguayo Mario Abdo Benítez. Enérgicamente calificó los comentarios de Abdo como un «monólogo vacío» y utilizó su cuenta de Twitter para expresar su firme repudio.

Además de criticar el discurso de Abdo, Rodríguez recordó a Paraguay la significativa deuda que su país tiene con Venezuela. Se refirió al hecho de que la petrolera estatal paraguaya Petropar aún adeuda cerca de 300 millones de dólares a PDVSA.

Una vez más, la voz de Venezuela se hizo oír en un evento internacional donde se pudo confirmar que el Estado y su gobierno actualmente gozan de legitimidad y ascendencia en el concierto de naciones, aun cuando la UE atentó contra la estabilidad de la república en un momento crítico de perturbación e intento de golpe durante los últimos años.

La emergencia energética europea es un factor nodal en el cambio de postura, pero asimismo la imposición de las condiciones de Venezuela para establecer relaciones de cooperación y desarrollo tras casi un lustro de «máxima presión» sobre el país.

Mision Verdad

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